Costa Oriental del Lago, mayo de 2018
Al Gremio y la Colectividad en general
Queremos iniciar refiriendo que la libertad de expresión es la principal herramienta mediante la cual los pueblos se sirven, como mecanismo que permite a los ciudadanos manifestar sus inquietudes y quejas, así como emitir una opinión ante un hecho, siempre y cuando se respeten los parámetros del respeto y la moral.
En tal sentido, queremos fijar posición con respecto a la situación que se presentó en el municipio Lagunillas, alrededor del programa “Buenas Tardes Col” que era transmitido por América 97.5 FM, el cual era conducido por los colegas Rixia Navarro (miembro del CNP COL) y Danilo Gil. Quienes se desempeñaban cada día en informar así como prestar su espacio a dirigentes, vecinos, empresarios y fuerzas vivas de Ciudad Ojeda, sin distingo alguno. Cabe destacar que dicha estación era propiedad de nuestro colega y miembro del gremio, el licenciado Nelson Barroso y tras su trágica partida, sus familiares quedaron encargados de la estación.
Tras un tiempo, finalmente la estación cambia de propietario, estableciendo nuevas líneas editoriales, y sin aviso previo o con el debido respeto que merecen los periodistas, y más en un espacio tan escuchado, la “la nueva gerencia” decidió sacar del “aíre” el programa “Buenas Tardes Col”.
Sabemos de la autonomía de los propietarios en determinar su línea editorial, pero cabe destacar que cada productor, moderador, cualquier trabajador, merece del respeto y tiempo suficiente a fin de establecer otras opciones laborales. No es justo, que estas personas que ahora asumen la gerencia de la estación América 97.5 FM, y por afinidades a una ideología socialista, no piensen en:
En tal sentido, como representantes de más de 400 afiliados en toda la Costa Oriental del Lago, y bajo el precepto de la lucha a favor de la libertad de expresión, el acceso a la información, así como el deber de informar verazmente, acordamos:
Sin más, esperando que dicha declaratoria se haga presente en cada espacio donde labore un periodista, en cada oficina donde un comunicador responda a su compromiso moral y gremial, en las redes sociales, como un manifiesto de protesta en contra de los atropellos de los cuáles somos víctimas.
DC / NP