El intento de revivir el diálogo entre el gobierno de Daniel Ortega y la sociedad civil se vio cruzado por violentos enfrentamientos entre estudiantes, fuerzas policiales y grupos violentos. Se reportaron algunos heridos.
En la mañana, los estudiantes que protestan ocuparon el campus de la Universidad Nacional de Ingeniería de Managua. Más tarde fueron atacados violentamente por un grupo de civiles que vecinos del lugar y simpatizantes de los jóvenes ayudaron a repeler. Intervinieron también agentes antimotines, que atacaron con gas lacrimógeno y balas de goma a los estudiantes que han manifestado su rechazo a las acciones del gobierno en las últimas semanas.
Algunos periodistas también fueron atacados por las fuerzas policiales, según la agencia de prensa EFE, la cual describe que dos de sus trabajadores fueron golpeados y se les dispararon balas de goma durante el cubrimiento de la protesta.
Entretanto, la Comisión Mixta del Diálogo Nacional se reunía para tratar de retomar las conversaciones entre el gobierno, de un lado, y representantes de estudiantes, empresarios y la iglesia católica, del otro, que se interrumpieron días atrás. Aunque se llegó a un acuerdo para reanudarlas, la violenta jornada dejó en suspenso la fecha en que se retomarán.
Los estudiantes acusaron una vez más al gobierno de serias violaciones a los derechos humanos. «Los métodos que el Gobierno ha utilizado para enfrentar la crisis nacional actual, han sido crueles e indiferentes al sentir de la población, utilizando la censura, la intimidación, la violencia y vergonzosamente la burla ante la inmensurable pérdida de vidas humanas», expresaron en un comunicado.
El gobierno, por su parte, denunció la destrucción de la Fiscalía y un complejo policial de la ciudad de Masaya, al oeste del país, atribuyéndolo a «grupos delincuenciales derechistas». Habitantes de la zona dijeron a la agencia EFE que los responsables serían trabajadores del Estado, ya que el personal de la Fiscalía fue visto sacando los muebles y la papelería en la víspera, una estrategia que denuncian fue utilizada por el oficialismo en ocasiones anteriores.
Así transcurrió el día número 41 de protestas contra el gobierno de Daniel Ortega, que han dejado cerca de 80 muertos y 800 heridos, en su gran mayoría resultado de la dura represión con que se ha enfrentado a los manifestantes.
El diálogo nacional pende de un hilo mientras la tensión no baja entre los dos campos en que se ha dividido de manera creciente el país: el gobierno de Daniel Ortega y su esposa Rosario Murillo y los estudiantes que piden su salida del poder, con el apoyo de diversos sectores de la población.
DC / France24 – EFE