La antorcha de los XI Juegos Suramericanos-Cochabamba 2018 arde desde hoy para anunciar la fiesta del deporte en Suramérica, tras su encendido en la antigua ciudad de Tihuanaco, como manda la tradición en recuerdo de su primera edición, hace cuarenta años en Bolivia.
El fuego fue encendido en una ceremonia ancestral por amautas o sabios andinos frente a los muros de esta antigua civilización preincaica, en un ritual a la Pachamama o Madre Tierra.
DC / EFE