Muchas personas asocian el ejercicio eficaz con un ejercicio intenso. Están muy equivocados. Uno de los mejores ejercicios que podemos hacer es gratis, sencillo y no precisa de ningún tipo de equipamiento. Caminar es bueno para perder peso y calorías incluido el que se acumula en forma de grasa abdominal.
El cuerpo no puede eliminar grasa solamente de un área, para reducirlas se debe quemar grasa en todo el cuerpo. Quemar calorías debe ser el principal objetivo al comenzar a hacer ejercicio. Los ejercicios cardiovasculares están comprobados como la mejor manera de perder peso.
Trotar es uno de los más sencillos y eficientes. Pero si por cualquier circunstancia no se tiene la resistencia para ello, caminar rápidamente a un buen ritmo, aumentando progresivamente esa velocidad, es igualmente efectivo. Además irá poco a poco mejorando la condición física. Esto también aumentará el metabolismo y hará quemar más calorías.
La fórmula para quemar calorías es: “tu peso x la distancia caminada = energía gastada caminando”. Hoy en día todo es más fácil y no se necesita de cálculo alguno si se cuenta con una aplicación digital de salud y ejercicio.
El tiempo no importa tanto como la distancia, pero si se camina a mayor velocidad, se quemarán más calorías por kilómetro. Si se camina despacio a 4 km/h se quemarán unas 300 calorías en una hora. Si se aumenta la velocidad a 6 km/h se quemarán 360. Corriendo a 8 km/h se pierden entre 400 y 500 calorías por hora. Para quemar calorías lo mejor es caminar largas distancias.
Los beneficios
Quemagrasa: Caminando de 30 a 60 minutos a una velocidad que lleve tu ritmo cardíaco a un 60% o 70% de su capacidad quema un 85% de calorías en forma de grasa.
Aumenta tu metabolismo: Caminando a un paso moderado 30 a 60 minutos no solo quema grasas acumuladas sino que construyes músculos que aumentan tu metabolismo.
Menor riesgo de enfermedad: Estudios médicos revelan que una caminata reduce el riesgo de infartos cardíacos, cáncer, diabetes y problemas de vejiga.
Longevidad: El caminar también promueve la vitalidad y reduce el riesgo de fracturas de cadera en personas mayores.
Más energía: Caminar aumenta los niveles de energía.
El tip del chicle
Según investigaciones científicas, masticar un chicle mientras camina aumenta el consumo energético. La investigación, publicada en The Journal of Physical Therapy Science, la hicieron científicos japoneses con un grupo de 46 hombres y mujeres con edades comprendidas entre los 21 y los 69 años.
Comer chicle aumenta la frecuencia cardíaca y el consumo de energía en reposo. Los investigadores quisieron comprobar sus efectos durante una actividad física moderada. Los resultados revelaron que comer chicle aumentó el ritmo cardíaco, la distancia recorrida, el número de pasos dados y la energía consumida.
DC / Kien y Ke