La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) está trabajando para que Nicaragua no se transforme en una nueva Venezuela, expresó el secretario ejecutivo de la institución, Paulo Abrão.
Abrão se pronunció sobre las similitudes y diferencias entre Venezuela, sumergida en una grave crisis económica y social, y Nicaragua, donde entre 277 y 351 personas han muerto, según organismos humanitarios, y más de 2.000 han resultado heridas en las protestas que piden la renuncia del presidente, Daniel Ortega.
«Lo que hay de común es la respuesta autoritaria por parte de las autoridades, en el sentido de no privilegiar una conciliación para alcanzar soluciones a la crisis», explicó Abrão.
«Lo que hay de diferencia es el rol que las fuerzas armadas están jugando porque, en Nicaragua, las Fuerzas Armadas todavía no se han decidido explícitamente a apoyar al gobierno», agregó.
DC | EFE