Pasaron las elecciones en Colombia y recientemente en México, según las encuestas se dio lo que debía pasar. Primero ganó el candidato del Uribismo y en el segundo país gano AMLO que a la tercera fue la vencida ¿Porque hablo de esto y que tanto me puede interesar? Pues hace quizás hace 10 años atrás, veía las cosas egoístamente, solo me interesaba culminar la tesis de grado y permanecer en la empresa que hacia las pasantías profesionales.
Era un joven cargado de muchos sueños, ni siquiera la política figuraba en uno de ellos. No me pasaba por la mente haber hecho las cosas que pude haber realizado por mí y por el país que tanto amo. Mucho menos me veía en otro lugar distinto a Venezuela ¡Sí! yo y los míos estábamos bien, pero no sabía cuál era el plan de Dios. Nos cambió la vida en menos de 10 años. Inclusive la dinámica de los países a donde emigramos cambio, como Colombia que era netamente emigrante, tuvo que recibirnos de la nada, modificar leyes y hasta su estilo de vida. ¡Si! Somos una anormalidad que vinimos con nuestras costumbres, ambiciones, fortalezas, debilidades, necesidades y vicios a perturbar la cotidianidad.
No con esto justifico la Xenofobia, para nada. Entender una realidad que no vivías no te exime de cometer un desplante a un (a) Venezolano (a) solo por lo malo que puede exhibir un noticiero o un periódico. Eso bajo ningún concepto se debe permitir a estas alturas, donde la humanidad tiene más cosas por aceptar que por recriminar. Pero este no es el tema en discusión… desvaríe.
Lo que intento es combatir el olvido, recordar quienes éramos y quienes queríamos ser. La responsabilidad de mi futuro depende de mí, pero es intentar hacer ver que tanto puede afectar en tus planes un gobierno que comenzó siendo autoritario, luego totalitario, posterior una tiranía y ya una dictadura. Eso no se produjo de la noche a la mañana y es por ello nuestro miedo de quienes vivimos en esos países que fueron a elecciones y alertábamos lo que podía pasar si un Populista llegaba al poder y más con sed de venganza, aunado a un discurso de odio que hace un fenomenal daño: la división social.
Combatir la desmemoria considero que debe ser un trabajo de todos aquellos que podemos tener una voz, bien sea visible, audible o leíble. Pero tiene que ser parte de un trabajo que debemos proponerlo. Recordar y mantener fresca esa visión del venezolano que sabemos que éramos y que con tanta basura socialista perdimos. Hoy somos una mezcla extraña, dañada y rencorosa.
Si no podemos encontrar ese recuerdo, transformémonos y tratamos de ser mejores de lo que hoy somos. Algo bueno tenemos que sacar de toda experiencia. Tenemos que reconstruirnos, comenzando desde esa pequeña pieza de rompecabezas que somos. Para que desde donde estemos, comencemos a armar un nuevo país con gente que está dentro de Venezuela y los que estamos regados en el mundo.
¡Hay que combatir el Olvido que produce el Odio!
DC / Orlando Fuenmayor – @orlanjosfs