A través de una llamada telefónica los padres de Misael Alexander Salazar, recibieron la amarga noticia de que el cuerpo del joven de 20 años, yacía en las aguas del río Guarapiche.
Al muchacho lo buscaban desde la noche del sábado, y al ser notificados del hecho, decidieron meterse a los bajos de la primera etapa de Los Jabillos, parroquia Boquerón.
Mientras hacían caminos en medio de una densa vegetación, vieron desde lejos varias aves de rapiña merodeando la zona.
Su corazonada cada vez se hizo más fuerte; al llegar al sitio donde volaban las aves, hallaron al cuerpo del joven boca abajo con un tiro en la cabeza, semidesnudo y atascado en unos matorrales dentro del cauce del río.
Estaba desaparecido
Misael había salido de su vivienda ubicada en el sector Primero de Mayo, la tarde del sábado, en esta oportunidad lo hizo en compañía de dos amigos, que andaban a bordo de un vehículo pequeño.
“Ellos fueron a rumbear, pero ese día no llegó a la casa, solo lo vimos y dijo que regresaría temprano”, señaló la hermana de la víctima.
Luego de haber terminado el bomche en el que se encontraban, se dispusieron a regresar, a Salazar lo dejaron a las 2:00 am, en la entrada de El Manantial, a escasas cuadras de sus sector. Desde entonces no volvieron a saber de él.
Sin embargo, otra versión se rumoró la mañana de ayer, mientras los familiares reconocían el cadáver, es que, cerca de las 2:00 am, el pasó cerca del lugar donde había una fiesta, pero en un descuido desapreció.
Aseguraron que el hecho de sangre ocurrió en la etapa dos de Los Jabillos, en la misma jurisdicción, donde sonaba una miniteca.
Según las pesquisas preliminares, el hombre fue sentenciado de un balazo en la cabeza, pero sus asesinos para desaparecer el cuerpo, decidieron lanzarlo al Guarapiche.
Todos señalaron a los efectivos de del cuerpo detectivesco que, Misael Rafael se encontraba con dos presuntos amigos cuando desapareció, y al parecer, ellos fueron sus verdugos, por lo que quedará de parte de los detectives esclarecer los hechos. Hasta ahora ajuste de cuentas se maneja como móvil del crimen.
DC / el periódico de Monagas