Como zombis amanecen los zulianos luego de padecer, entre las 11:00 pm y las 4:00 am, dos cortes que en la mayoría de los casos no están previstos en el Plan de Administración de Cargas (PAC) anunciado este lunes 2 de julio.
De hecho en la madrugada del 5 de julio nuevamente afectó a múltiples sectores de la entidad, incluso a aquello que ya habían tenido suspensión por el Programa de Administración de Carga (PAC), de Corpoelec.
Esta situación actual es provocada por las altas temperaturas que generan recalentamiento en las subestaciones eléctricas, según indicó el secretario de Gobierno, Lisandro Cabello.
“Por lo que nos explicó la autoridad única, Alberto Pérez Pérez, tuvimos una situación de calentamiento en esta fecha que obligó por el tema térmico a parar el sistema, para que no se quemaran unas subestaciones, ahorita tuvimos un problema en la S/E Caujarito con un autotransformador. Están los equipos allá”, precisó Cabello.
El secretario de Gobierno agregó que el sistema eléctrico “tiene protectores térmicos”, empleados en caso que autotransformador sufra una elevada carga térmica de manera automática se proteja, por lo que “en febrero trajimos 3 autotransformadores para colocarlos y cuando esta situación térmica aparezca, como va a aparecer por el tema climático, hagan el respaldo”, dijo.
Aseguró que los equipos, que darán estabilidad al sistema eléctrico, están “en plena colocación esta semana”.
Igualmente, informó que los aparatos “van a hacer un respaldo”, para los autotransformadores que están para 450 Mw, y que tras el evento del miércoles sobrepasaron los 530 y 550 Mw. Sostuvo que fue esta extralimitación de cargas la que hizo que se apagaran. Todo conllevó a otro “blackout”.
Así lo vivieron los marabinos desde Santa Lucía hasta Pomona y de Sabaneta hasta Delicias. En el primer sector, Liribeth Vergel, en la calle 89-E, con suspensiones que se prolongan desde las tres de la tarde hasta las 8:00 pm y que “rematan” con apagones a las 12:00 am que fácil se extienden a las 2:00 am.
“No cumplen ningún cronograma. ¿Cuál es el objeto de insistir en sacarlos si no pueden? Ya cuando vayan a lanzar uno que sea serio ni les vamos a creer”, expresó, indignada, la ama de casa.
Calles más abajo, en la 89-G, también María Albañil reclamó los múltiples cortes de día y noche, en los que los vándalos hacen de las suyas. “Esto está muy peligroso”, dijo, al contar que el hampa de noche se “desató” y se llevó las “bombas” del agua en su casa.
Un saldo devastador dejaron los recientes apagones a Edgar Curiel. Dos aires acondicionados, un microondas, dos lavadoras, un par de televisores y una plancha fueron los artefactos quemados que aún no logra reponer. Una sola petición se multiplica en el vecindario: “¡Qué respeten el cronograma!”, clamaban incesantes.
En Veritas, también resonó la exigencia a las autoridades, luego que un transformador de la subestación estallara la noche del miércoles y les erizara una vez más la piel a los residentes.
“Ya no hallamos cómo hacer, siempre es el mismo problema. Tendremos que trancar la calle para que nos tomen en cuenta y no se nos vaya tanto la luz”, reclamó Durnelis Delgado, desde su casa en la calle 87 con avenida 11.
La mujer detalló su desespero cuando la luz se va. “Salgo en la madrugada a llevar al bebé a la casa de mi cuñada que queda a unas cuadras, porque allá no se va para que por lo menos me lo tenga en aire acondicionado, porque los mosquitos lo dejan lleno de ronchas. Es un peligro exponernos todas las noches, nos puede pasar algo”, denunció.
En Pomona explotaron transformadores, contó María Araujo desde su hogar. “El estallido retumbó y la explosión alumbró todo”, exclamó Araujo, luego de explicar que otro corte nocturno la sorprendió desde las 8:15 pm hasta las 2:00 am y, para rematar, desde las 7:30 am no contaba con el servicio, a pesar de que transcurría ya media mañana.
En Belloso, Delicias, La Estrella, Haticos, Sabaneta, Gallo Verde, San Jacinto, 18 de Octubre, La Victoria, Altos del Sol Amado, 1 de Mayo, El Milagro, Santa Rita, Bella Vista, entre otros sectores, reportaron la falta eléctrica.
Pero otra explosión se vivió la noche en Amparo, a las 12:30 am, mientras Geralis Díaz iba camino a casa. “El resplandor era inmenso, por todos lados se veía alumbrado entre la oscuridad que había por los apagones”, recordó.
También en la subestación ubicada en San Francisco, en la vía a Perijá, hubo una falla que generó desperfectos en la distribución del fluido eléctrico. Tras el evento, sectores sureños como San Felipe, La Popular y El Soler quedaron a oscuras hasta pasadas las 3:00 am.
DC | Panorama