Donald Trump agradeció el viernes el regreso desde Pyongyang de los soldados estadounidenses que cayeron durante la Guerra de Corea, lo que le da un soplo de aire fresco mientras Washington lucha para demostrar que su acercamiento con el líder Kim Jong Un está dando sus frutos.
«Quiero agradecer al presidente Kim por mantener su palabra», dijo el presidente Trump en la Casa Blanca.
Los restos mortales de soldados caídos serán trasladados a territorio estadounidense, donde serán recibidos por familiares y el vicepresidente Mike Pence.
Un avión militar enviado por Washington sacó este viernes de Corea del Norte los restos de soldados estadounidenses muertos en la Guerra de Corea, una iniciativa que EEUU elogió como un gesto «positivo» a favor de la frágil distensión entre ambos rivales.
El retorno de los restos de los estadounidenses que murieron en ese conflicto (1950-53) forma parte de un acuerdo firmado entre el dirigente norcoreano Kim Jong Un y Donald Trump durante su histórica cumbre celebrada en junio.
«Después de tantos años, este será un buen momento para tantas familias. Gracias Kim Jong Un», había expresado antes Trump en la red Twitter.
El retorno de los restos a Estados Unidos coincide con el 65º aniversario del armisticio que terminó con las hostilidades en la península de Corea.
El avión de carga aterrizó cerca de las 02H00 GMT en la base aérea de Osan, Corea del Sur, donde los soldados estadounidenses se formaban para una ceremonia, mostró la televisión en una transmisión en vivo.
La Casa Blanca confirmó esa información y precisó que la nave utilizada había salido de Corea del Norte.
«Un avión C-17 de la Fuerza Aérea Estadounidense que contiene los restos de los soldados caídos salió de Wonsan, Corea del Norte», indicó el comunicado.
Más de 35.000 estadounidenses murieron en la Península Coreana durante la guerra, de los cuales 7.700 están reportados como desaparecidos, incluyendo 5.300 en territorio norcoreano, según los datos del Pentágono.
«Las acciones de hoy representan un primer paso muy significativo para recomenzar la repatriación de restos desde Corea del Norte y para reanudar las operaciones de campo en Corea del Norte para buscar a un estimado de 5.300 estadounidenses que todavía no han vuelto a casa», dijo la Casa Blanca en un comunicado.
– ‘Estrujar’ –
Entre 1990 y 2005, un total de 229 conjuntos de restos procedentes de Corea del Norte fueron repatriados, pero esas operaciones fueron suspendidas cuando los vínculos entre ambos países se deterioraron por la crisis del programa nuclear de Pyongyang.
Está previsto que los restos que aterrizaron en Osan el viernes sean enviados a Hawái para ser examinados por expertos forenses.
El Comando de las Naciones Unidas en Corea del Sur (UNC) dijo que a bordo del avión había 55 conjuntos de restos.
«Fue una misión exitosa después de una exhaustiva coordinación», dijo el general Vincent Brooks, comandante de las tropas del UNC y del contingente estadounidense.
«Ahora nos preparamos para honrar a nuestros caídos antes de que continúen su viaje a casa», agregó.
Trump ha celebrado los acuerdos de la cumbre con Kim como un freno efectivo a la amenaza nuclear de Corea del Norte, aunque Pyongyang sólo se comprometió difusamente a la «denuclearización de la Península de Corea», algo lejano al concepto de un desarme completo, verificable e irreversible que exige Washington.
El tema de la repatriación de restos de estadounidenses caídos en combate era considerado como un tema menos espinoso y en la cumbre se dejó establecido el retorno inmediato de aquellos «ya identificados».
El exgobernador de Nuevo México, Bill Richardson, que ha trabajado en temas de repatriación y ha estado en Corea del Norte varias veces, advirtió que Pyongyang puede retener más devoluciones para aprovechar de obtener más dinero de Estados Unidos.
«Ellos van a entregar un cierto número de restos gratis de forma inmediata», dijo Richardson al diario Washington Post.
«Pero, después van a decir: ‘los próximos vamos a necesitar encontrarlos, localizarlos, restaurarlos’. Y ahí van a empezar a cobrar y van a estrujar esto», advirtió.