Las autoridades recuperaron el domingo los datos del avión que un empleado de una aerolínea robó en Seattle y estrelló poco después.
La jefa regional de la Junta de Seguridad de Transporte de Estados Unidos (NTSB), Debra Eckrote, dijo que la caja negra de la aeronave estaba quemada pero intacta, según la cadena CNN.
Los registros serán enviados el lunes a Washington DC y el análisis de los datos debe comenzar a media semana.
Eckrote, responsable de la región oeste-pacífico de la NTSB, destacó el estado de destrucción del aparato, luego que pasara por varias líneas de árboles que lo dejaron en piezas pequeñas.
«Era difícil identificar que se trata de un avión a no ser por partes más grandes como el ala», indicó. «Las secciones pequeñas no parecen de un avión».
La NTSB no respondió aún al pedido de la AFP para confirmar el hallazgo.
Richard Russell, un funcionario de pista de la línea Horizon Air, robó el viernes de noche un bimotor turbohélice Bombardier Q400, que piloteó por más de una hora antes de estrellarse.
Dos caza-bombarderos F-15 persiguieron al avión tras su despegue, pero no llegaron a forzar su aterrizaje.
Russell iba solo en la aeronave para 76 pasajeros.
El sheriff describió a este hombre de 29 años como «suicida», mientras que amigos y familiares dijeron que era «callado», «muy amigable», «compasivo» y «cálido».