Los clientes de British Airways afectados por el robo de sus datos financieros obtendrán una compensación económica, prometió el viernes el presidente de la aerolínea británica afirmando que esta fue víctima de un “sofisticado ataque criminal”.
La compañía aérea anunció el jueves por la noche haber sufrido un robo en línea de datos a finales de agosto y principios de septiembre, en pleno periodo de vacaciones estivales, que podría concernir a unos 380.000 clientes a raíz de una brecha informática que ya fue solventada.
“Vamos a indemnizarlos por cualquier daño financiero que hayan podido sufrir”, anunció el viernes el presidente y consejero delegado de British Airways, el español Álex Cruz, a la emisora de radio BBC 4, precisando que la prioridad de la empresa es ahora contactar con todos los clientes afectados.
La aerolínea publicó también el viernes un mensaje de disculpas a toda página en los principales diarios británicos.
Cruz precisó que los datos robados conciernen al nombre, dirección y email de los clientes y, sobre todo, a los datos de sus tarjetas bancarias: número, fecha de expiración y código de seguridad de tres cifras.
Por el contrario, los hackers no pudieron acceder a los itinerarios de vuelo ni a la información que figura en los pasaportes de los pasajeros.
“Lamentamos profundamente lo ocurrido. Se produjo un sofisticado ataque criminal a nuestra plataforma en internet”, afirmó Cruz.
El hackeo tuvo lugar entre el 21 de agosto por la noche y el 5 de septiembre y conllevó el robo de los datos personales y financieros de los clientes que efectuaban reservas en la página web y la aplicación móvil de British Airways.
Según British Airways, su página en internet y su aplicación “han vuelto a la normalidad” y los clientes pueden registrarse en línea sin problemas.
Este robo de datos informáticos preocupó a los inversores, afectando a la cotización en bolsa de IAG, el grupo que engloba a British Airways e Iberia entre otras aerolíneas, cuyas acciones perdían un 2,76% a 6,62 libras en la apertura de la bolsa de Londres.
Este no es sin embargo el primer incidente informático que enfrenta la empresa: en mayo de 2017 sufrió una gigantesca avería, provocada por un problema de alimentación eléctrica, que la obligó a anular 726 vuelos, es decir 28% de sus aviones, durante un fin de semana de tres días.
El percance provocó un inmenso caos en los aeropuertos londinenses de Heathrow y Gatwick que afectó a 75.000 pasajeros.
DC – AFP