La isla Mauricio reivindicó el lunes ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) su soberanía sobre las islas Chagos, al afirmar que fue forzada a ceder al Reino Unido este archipiélago en el océano Índico que alberga una importante base militar estadounidense.
Los representantes de Mauricio abrieron los debates ante el tribunal de La Haya sobre el futuro del territorio separado por Gran Bretaña en 1965 y donde Londres instaló una base común con Estados Unidos en la isla Diego García del archipiélago.
«Más de 50 años después de la independencia, el proceso de descolonización de Mauricio sigue incompleto», declaró el expresidente Anerood Jugnauth que participó de las negociaciones de la época.
La división territorial se llevó a cabo «bajo coacción» en el marco de las conversaciones sobre la independencia de Mauricio concedida tres años más tarde por Londres, agregó el exdirector que denunció «el resultado del desplazamiento ilegal» de una parte de nuestro territorio».
La sesión abierta el lunes es la consecuencia de una resolución adoptada en junio de 2017 por la Asamblea General de la ONU. En un revés diplomático contra Londres, el texto presentado por Mauricio y apoyado por los países de África piden a la CIJ su opinión en el litigio que lleva más de medio siglo.
Los 15 jueces del principal órgano judicial de las Naciones Unidas escucharán los argumentos sobre «las consecuencias legales de la separación del archipiélago de Chagos de Mauricio».
La Unión Africana y 22 países, entre ellos Reino Unido, Estados Unidos, Alemania y varios países de Asia y de América Latina participarán del proceso de cuatro días.
– Opinión consultiva –
Los jueces de la CIJ, un tribunal encargado especialmente de examinar los conflictos jurídicos entre los Estados, emitirán su «opinión consultiva» en un plazo de algunos meses o incluso años.
Esta opinión no vinculante podría dar argumentos a Mauricio que reclama la devolución de Chagos y estima que Londres «desmembró ilegalmente» su territorio.
La separación del archipiélago de 55 islas, de las cuales solo tres están habitadas, ocurrió entre 1968 y 1973, cuando cerca de 2.000 chaguenses, descritos en un cable británico de la época como «algunos Tarzanes y Viernes», fueron progresivamente expulsados.
En un primer momento, a los chaguenses que habían ido a Isla Mauricio de viaje o con fines médicos se les prohibió volver a sus casas. El resto de la población fue expulsada sin contemplaciones a Isla Mauricio o las Seychelles entre 1971 y 1973.
En 1965, Londres compró las Chagos por tres millones de libras a las instituciones semiautónomas de Mauricio y las transformó en una nueva entidad: el British Indian Ocean Territory. El archipiélago siguió bajo control británico después de la independencia de Isla Mauricio, tres años después.
El lunes, el expresidente Jugnauth afirmó que la delegación de Mauricio de la época no tuvo derecho a «a ninguna opción» sobre el tema de las Chagos.
Tras reuniones secretas en Londres, el primer ministro británico de la época, Harold Wilson, quiso «meter miedo» a los responsables de la isla para forzarlos a ceder el archipiélago, agregó Jugnauth.
Harold Wilson les dijo que podían irse a Port Louis «con o sin independencia» y que «la mejor de las soluciones podría ser la independencia y la separación (de las Chagos) a través de un acuerdo», narró.
«Es en el contexto de esta enorme presión y en circunstancias equivalentes a la coacción que, menos de cinco horas después, cuatro de los cinco representantes de Mauricio cedieron el archipiélago de Chagos», dijo.
DC / AFP