El Gobierno argentino dijo hoy que trabaja con la Justicia para que se celebre un juicio abreviado contra dos venezolanos, un turco y un paraguayo que participaron en los disturbios de este miércoles en las inmediaciones del Congreso, con el fin de “deportarlos lo antes posible”.
“Respecto a los extranjeros vinculados a los hechos de violencia de ayer, ya estamos en contacto con el juez y fiscal para tener un juicio abreviado y poder deportarlos lo antes posible”, expresó en rueda de prensa el ministro del Interior, Rogelio Frigerio.
Ayer, el Palacio Legislativo argentino, en Buenos Aires, registró en sus alrededores fuertes disturbios entre manifestantes y la policía mientras los diputados debatían el proyecto de presupuesto para 2019, que cuenta con gran rechazo entre parte del abanico político y social por los ajustes que conllevará.
Con la plaza del Congreso cercada por un fuerte dispositivo de seguridad, los incidentes, que se expandieron por calles del entorno, se dieron cuando un grupo de personas se puso a arrojar piedras y los agentes policiales reaccionaron tirando chorros de agua desde camiones cisterna, gases lacrimógenos y balas de goma.
El operativo se saldó con 26 detenciones, varios heridos e innumerables destrozos en el mobiliario urbano.
Todos los arrestados fueron puestos en libertad por la noche, según informaron a Efe fuentes de la Fiscalía a cargo de la investigación de los sucesos, que confirmaron que entre ellos están dos venezolanos, un paraguayo y un turco.
“No tenemos conocimiento de a quiénes responden esos grupos violentos, claramente intentaron poner en riesgo el ejercicio de la democracia, que se plasma como en ningún otro lugar en el Congreso de la Nación”, explico Frigerio.
Por su parte, la titular de la cartera de Seguridad, Patricia Bullrich, negó en el mismo acto ante la prensa que el Gobierno tenga información alguna de que el Ejecutivo de Nicolás Maduro tenga algo que ver con la actuación de sus compatriotas.
“No tenemos ninguna información de que los venezolanos pertenezcan a un servicio de inteligencia. Ha circulado por los medios (de comunicación) pero no tenemos ninguna confirmación de eso”, sentenció.
En enero de 2017, el Gobierno de Mauricio Macri firmó un polémico decreto por el que endureció la política argentina de migración para evitar la entrada de extranjeros que hayan cometido delitos graves y acelerar los procesos de deportación de quienes delinquen en el país.
Consultado al respecto, Frigerio destacó que “hubo mas deportaciones este ultimo año que en los últimos 10”.
Bullrich afirmó que “está claro que las acciones violentas fueron producidas por miembros de distintos grupos”, que estaban “con una cantidad inmensa de armas de tipo caseras para atacar el Parlamento”.
“A mí me gustaría que los diputados de la Nación salgan a repudiar la violencia. Eso es lo que esperamos de cualquier demócrata”, añadió, respecto a algunos legisladores que, durante la sesión, fueron especialmente críticos con la actuación de la policía e incluso exigieron suspender el debate durante la “represión”.
Además, diputados opositores denunciaron haber sido agredidos por agentes de seguridad cuando salieron del Congreso para tratar de evitar la represión.
Finalmente, tras una sesión de 18 horas, la Cámara Baja aprobó el proyecto y lo envió al Senado para su debate y eventual aprobación definitiva.
EFE