Durante la sesión ordinaria de la Asamblea Nacional, el parlamentario Carlos Paparoni indicó que desde hace más de dos años se le hace un seguimiento e investigación al programa de alimentación del gobierno nacional, conocido como los CLAP y definido por el diputado como “un programa diseñado para tener una estructura ineficiente y con altos grados de corrupción. La importación de cajas CLAP atenta contra nuestro aparato productivo nacional”.
Paparoni detalló que en los primeros seis meses del año 2018, el gobierno invirtió 1,521 millones de dólares en la compra de 27 millones de cajas CLAP, lo cual representa solo doce días de comida para todo el país(…)“invierte -el gobierno- $56 por cada caja, cuando en realidad cuesta mucho menos, lo que significa que el kilo de comida en Venezuela se paga al precio más caro del continente: $4 por kilo.”
Además, el diputado se refirió a la calidad de los alimentos que “está muy por debajo de lo que exigen las normas nacionales e internacionales. Recordemos que por ingesta de la leche que viene en las cajas CLAPS cientos de niños se han enfermado y presentado cuadros delicados de salud y 92 han fallecido en el país”.
Al referirse a la producción nacional, Paparoni indicó que “de 35 millones de hectáreas con vocación agrícola apenas sembramos seis millones. De las 250 mil hectáreas que pudimos haber sembrado de arroz sólo pudimos sembrar 80 mil hectáreas. En maíz, tanto blanco como amarillo, que es la materia prima tanto de la arepa como de la alimentación animal, hoy apenas hemos cultivado 168 mil de 750 mil hectáreas diponibles en el país, solo hemos sembrado el 12% de la demanda nacional. Lo que quiere decir que el venezolano que en promedio consumía dos arepas diarias, con la producción actual de maíz sólo se podrá consumir una arepa cada cuatro días”.
Al referirse al consumo de carne y pollo, el diputado Paparoni indicó que debido a la escasez e hiperinflación cada vez el consumo es menor. “Para julio de 2018 apenas teníamos 280 mil pollos para nuestro consumo. La proteína más barata y accesible para los venezolanos como es el huevo, el consumo para junio 2018 fue de 63 unidades por persona es decir, dos cartones de huevos al año por cada venezolano. En marzo 2018, apenas llegamos a seis millones de gallinas ponedoras. Antes de la reconversión un cartón de huevos costaba cuatro millones de bolívares fuertes y hoy cuesta 60 millones, es decir 15 veces más de su valor”.
El diputado Carlos Paparoni enfatizó que las cajas CLAP son un modelo perverso diseñado por el Ejecutivo Nacional para ejercer el control social de los venezolanos, en vez de ocuparse de la producción nacional. “La solución está en el suelo venezolano. Con nuestra industria y nuestro campo recuperaremos a Venezuela”.
Nota de Prensa