Consejos para aplicar los primeros auxilios a pacientes con quemaduras
Las quemaduras son lesiones comunes que pueden suscitar en el hogar, en el ámbito laboral o, incluso, tras tomar el sol en la playa. Sin embargo, sus complicaciones pueden variar según el contexto y el daño que se haya producido en las capas de la piel.
Una de sus mayores causas pertenecen a la exposición a temperaturas extremas (tanto calor como frío) o a la radiación del sol, el contacto con productos químicos y corrientes eléctricas, según reseña el portal Mejor con Salud.
Para tratar la herida, los familiares o personas cercanas a la víctima deberán evaluar el daño y la localización de la quemadura. De esta manera se puede proceder a practicar los primeros auxilios:
- Terminar con la raíz del problema. Es de suma importancia alejar lo más posible al paciente de aquello que haya generado la quemadura.
- Comprobar los signos vitales. En casos de quemaduras que provoquen la inconsciencia en el paciente, es importante evaluar si está respirando y si su ritmo cardiaco es estable.
- Desprender las prendas de ropa y accesorios de la persona con sumo cuidado de que no estén pegada a la piel.
- Aplicar agua fría. Usualmente, las quemaduras son producidas por la exposición a temperaturas extremas, por lo que uno de los primeros pasos es sacar el calor de la herida mediante la aplicación de compresas con agua fría sobre la herida en intervalos de 2 minutos.
- Colocar suavemente gasas húmedas sobre la quemadura
- Untar cremas hidratantes o con aloe vera (si la lesión no es crítica, es decir, es superficial).
Cosas que no se pueden hacer
- Arrancar las prendas de vestir pegadas a la piel
- Administrar medicamentos sin un consentimiento médico, ni alcohol u otra sustancia.
- Reventar las ampollas o burbujas de agua en la lesión
- Enfriar durante mucho tiempo la quemadura, porque puede desarrollar hipotermia en el paciente.
Es importante recordar que, tras la aplicación de los primeros auxilios, el paciente sea atendido por un médico.
DC | Panorama