Ingresada en un hospital con una puñalada en el vientre, la sonrisa de Mariana Rocha lo explica todo. La surfista portuguesa, de 21 años y novena en el ranking femenino de surf de su país, sufrió un intento de violación el pasado viernes cuando regresaba a su casa de Estoril que logró evitar gracias a su “sangre fría”.
Rocha caminaba por la noche entre las playas de Poza y Azarujinha rumbo a su domicilio cuando fue asaltada por un hombre que la lanzó al suelo. La surfista pudo lanzar un rodillazo a los testículos del agresor, lo que evitó que fuera violada, pero no pudo esquivar la puñalada que recibió antes de que el hombre escapara corriendo. Aunque ya está fuera de peligro, Rocha no podrá viajar a Brasil donde tenía previsto competir en los próximos días.
Ha sido la propia surfista la que ha explicado lo sucedido en su página de Facebook. “Ira, frustración, dolor, miedo… Ni siquiera estoy segura de lo que siento… No sólo por saber la suerte que tuve, sino por el hecho de que el hijo de puta sigue ahí fuera. Me iba a casa sola por la noche, cuando un hombre trató de violarme. No lo hizo. Tuve la suerte de tener la sangre fría para darle un rodillazo en los testículos antes de que me apuñalara. Tengo mucho respeto por todas las mujeres que no pueden reaccionar como yo lo hice y son violadas por estos locos que están sueltos y deberían estar en el infierno. Sobre todo, doy gracias a Dios por seguir viva…”.
La Vanguardia