Venezuela no aguanta más, de la conducción chavista no podemos esperar más que el empeoramiento de lo que ya hoy es indigno, patético. El gobierno solo se aferra a promesas cazabobos tan desgastadas como inútiles, aún sigue prometiendo castillos aéreos como sí tuviese un mes en el poder… ya tienen 20 años manejado todo a placer y el país agoniza cada vez más aprisa, día a día se exacerban las diferencias entre el pueblo llano y los denominados “enchufados” a quienes sus vínculos con personeros del régimen los dotan como jeques en medio del hambre e infinidad de carencias masificadas.
Al igual que 2013, 2014, 2015, 2016, 2017 y 2018 Maduro ha prometido este 2019 será el año del crecimiento y la prosperidad definitiva ¿Usted le cree? Cómo va serlo en medio de sanciones internacionales impuestas por haber roto el hilo constitucional y haber masacrado la democracia. Cómo va serlo si el 10 de enero Maduro y su gobierno serán desconocidos por la comunidad internacional influyente/determinante como consecuencia de su ilegalidad e ilegitimidad. Cómo va ser el 2019 un año mejor sí el chavismo destruyó Pdvsa, única fuente de divisas tras haber maniatado el sector productivo. Cómo va serlo si nadie se atreve invertir en Venezuela, un país desinstitucionalizado, sin constitución imperante, de violencia permisada. Cómo va serlo sí el gobierno insiste en su “Plan de la Patria” que no es más que la imposición del castrismo en el país.
¿Podrá ser el 2019 un año de prosperidad? La gran pregunta es cómo. Será imposible en mitad de controles y racionamientos donde la corrupción es la regla. Será imposible donde una denigrante caja de comida importada y excluyente es el epicentro de las “políticas sociales”. Será imposible cuando el esfuerzo y el trabajo han sido sustituidos por bonos populistas exiguos, partidizados. Será imposible mejorar al país cuando la democracia, su voto, ya no premia, castiga ni genera cambios, una élite gobiernera y sus parentescos se han apropiado de todos los cargos, organismos e instituciones públicas. Venezuela jamás mejorará, sino que continuará agonizando, de la mano de una conducción desprovista de virtudes, que atiza la emigración de un pueblo sometido. Imposible mejorar cuando los principales socios internacionales son naciones antidemocráticas, tan endeudadas y sancionadas como Venezuela. Cómo el país mejorará si el chavismo no hace más que reciclar mismas políticas y personeros que han fracasado una y otra vez.
Entiéndase algo: Los “años dorados” del chavismo con Chávez se basaron en un estruendoso boom petrolero que le permitió tapar errores, desaciertos y corrupción con más y más petrodólares, cuando el precio del barril se estancó comenzaron los problemas. Luego, con Maduro, la pronosticada caída del precio del barril y la destrucción de Pdvsa dejaron en el hueso el proyecto chavista, así, la violencia institucionalizada, el reforzamiento de los controles/racionamientos se convirtieron en las herramientas para someter a un pueblo amante de la paz. Sí Chávez estuviera vivo hoy ocurriría exactamente lo mismo, pues la destrucción del aparato productivo, la petróleo-dependencia in extremis y el castrismo cubano eran su más firme norte… sí lo duda eche un vistazo al infausto “Plan de la Patria”.
El chavismo está vencido, aislado, atado ilegal/ilegítimamente al poder, es rechazado por propios y extraños, todo cuanto haga será solo para retener el poder sin importarle costos al pueblo. Estimado lector ¿Cree usted que el país, usted, su familia, podrían soportar otro año como el fatídico 2018? La respuesta es un rotundo ¡No! pero qué podemos esperar sí quienes dirigen la nación continúan siendo los mismos, con mismo proyecto, mismas intenciones, mismas trilladas excusas inverosímiles, haría ventilar un 2019 mucho peor al año que recién finalizó… ¡Reflexione!
Leandro Rodríguez / @leandrotango