El presidente Nicolás Maduro emitió un decreto en el que se declaran como «cultivos y crías de guerra» a 18 rubros alimenticios, según se publica en la Gaceta Oficial Extraordinaria N° 6.450, con fecha 17 de abril de 2019.
«El término de cultivos y crías de guerra, debe entenderse como la condición que adquieren estos rubros ante la amenaza actual y efectiva a las condiciones básicas para su producción, procesamiento y acceso (…) y la necesidad de éstos, por constituir rubros de origen vegetal y animal, indispensables para la alimentación y subsistencia de la población en tales condiciones, siendo obligación del Estado mediante sus políticas públicas, asistir a la población en su derecho a la protección frente a situaciones que constituyan amenazas, vulnerabilidad o riesgo para su integridad física», señala el artículo 1 del documento.
Los productos objeto del decreto son frijol, topocho, plátano, caraota, maíz, papa, quinchoncho, yuca, ocumo, ñame, auyama, apio, plantas medicinales y la cría de especies animales caprino, cunícola, avícola, ovino y porcinos». Para ellos se procurará «condiciones especiales a sus respectivos encadenamientos productivos» y la producción de semillas.
El decreto pone sobre los hombros de instituciones científicas adscritas al Ministerio de Agricultura y Tierras, «articular la ejecución de las actividades materiales, productivas, financieras, tecnológicas y de innovación, así como de los planes y programas para el desarrollo de los rubros». También incluye a la Corporación para el Desarrollo Científico y Tecnológico, dependiente del Ministerio de Ciencia y Tecnología y a la Universidad Nacional Experimental Simón Rodríguez.
Otorga un plazo de 30 días para presentar un plan con «los objetivos, metas y aspectos a desarrollarse en el ámbito agrícola, pecuario, ambiental, comercial, social y de seguridad».
Adicionalmente, la orden presidencial establece que la «banca nacional pública o privada, aplicará a los financiamientos que se otorguen para el desarrollo de las actividades productivas de los rubros, condiciones preferenciales y de fácil accesibilidad para los productores».
También «se analizarán e implementarán, en coordinación con el Ministerio de Economía y Finanzas, incentivos económicos y fiscales para promover la producción y procesamiento» de los «cultivos y crías de guerra».
Otras condiciones incluyen formación continua para la producción y procesamiento, contratación de servicios agrícolas, «recuperación y regularización de tierras» y sistemas de certificación internacional de semillas
de producción nacional para exportar.
El decreto llega en momentos en que el país atraviesa su peor crisis económica y donde la producción agrícola se ha desplomado debido a la falta de insumos, así como a la política de expropiaciones de empresas vinculas y tierras.
En 2016, Maduro designó a un grupo de 18 generales que supervisarían igual cantidad de rubros básicos, entre ellos varios de la lista ahora de «cultivos y crías de guerra». En 2017 se comenzó a dar impulso a la cría de conejos y cabras, incluso se estimuló a la población a mantenerlos en sus casas.
A finales de abril de 2019 la FAO incluyó por primera vez a Venezuela en su lista de país con alto riesgo alimentario, por considerar las dificultades para «el acceso a los insumos requeridos, agroquímicos y semillas», así como condiciones climáticas adversas.
Banca y Negocios