La Ayuda Humanitaria es un hecho. Por Lester Toledo (@LesterToledo)

Son 814.000 kilogramos de insumos médicos y alimentos que, gracias a la intervención de cientos de héroes anónimos, han hecho posible el milagro que miles de venezolanos estaban esperando, la llegada de la Ayuda Humanitaria a Venezuela.

 

Han transcurrido 100 días desde que, por instrucciones del Presidente (E) Juan Guaidó, se constituyó la Coalición Ayuda y Libertad Venezuela. Desde el día uno al de hoy, el ánimo, el compromiso, las alianzas y la solidaridad no han cesado, lo que nos ha llevado a ser testigos de un milagro cada día.

 

A pesar de que el ingreso regular de esta ayuda fue obstaculizado criminalmente por el régimen usurpador, eso no ha sido impedimento para que esta llegue a quienes más la necesitan. Hospitales, comedores, albergues, ancianatos y organizaciones no gubernamentales, han recibido, de la mano del Presidente (E) Juan Guaidó, la Primera Dama Fabiana Rosales, activistas por los DDHH y los diputados a la Asamblea Nacional, la ayuda para aliviar -en parte- las necesidades del venezolano.

 

Con los insumos que hemos logrado hacer llegar a nuestro territorio, miles de venezolanos han sido atendidos en diferentes jornadas y campamentos humanitarios, la mayoría de ellos organizados por Rescate Venezuela, organización coordinada por Lilian Tintori, quien también ha trabajado incansablemente para sumar a este propósito.

 

Desde la Coalición Ayuda y Libertad continuamos buscando apoyos en la comunidad internacional para la consecución de nuestros objetivos para Venezuela. A la par la diáspora venezolana, desde todas partes del mundo, también se ha organizado para sensibilizar sobre la crítica situación que atraviesa nuestro país y para llevar a cabo históricas jornadas de solidaridad y recolección de ayuda para socorrer a los hermanos venezolanos, jornadas en las que han participado de forma activa y protagónica Fabiana Rosales, nuestro embajador ante Estados Unidos, Carlos Vecchio y cientos de voluntarios que llevan a Venezuela en su corazón.

 

Con gran humildad y compromiso confirmamos la entrega de más de 800.000 kilogramos de Ayuda Humanitaria en Venezuela, lo que equivale a 24 contenedores completos llenos de insumos y alimentos, logramos articular una cadena de distribución nacional en Venezuela con la cooperación de más de 100 ONG listas para recibir ayuda humanitaria a nivel masivo, establecimos alianzas con las empresas más grandes del mundo en materia de envíos y logística para la preparación del plan de emergencia,  una vez cese la usurpación, y coordinamos esfuerzos con 57 ONG que cuentan con amplia experiencia en operaciones de ayuda hacia Venezuela, logrando consolidar un listado único de prioridades y una data completa de necesidades.

 

Sabemos que esto no es suficiente, que lamentablemente este régimen criminal ha llenado de necesidades y urgencias a la inmensa mayoría de la población venezolana. Por eso nuestra tarea es seguir sumando ayudas. Sabemos además que la labor de un gobierno es garantizar la salud y el bienestar de su pueblo, no socorrer con medidas paliativas a la población, sin embargo, mientras nuestra nación se encuentre en esta crisis inducida por una dictadura narcisista y criminal, nosotros nos mantendremos firmes en nuestro rol humanitario y seguiremos hablando con todas las organizaciones que tengan experiencia en  el tema humanitario porque nosotros ni negociamos, ni hacemos política con la vida ni las necesidades de la gente.

 

La mejor y más importante ayuda humanitaria que urge Venezuela es el cese definitivo de la usurpación, que se establezca un gobierno de transición al que sí le duela el pueblo, que facilite el ingreso de la ayuda humanitaria por las vías formales y a puertas abiertas.

 

Gracias a quienes han hecho posible estos 100 días de solidaridad, de esperanza y de vida. No hay cansancio ni agotamiento físico que valga cuando en respuesta a todo ese sacrificio se recibe el agradecimiento de un padre o de una madre, cuando vemos que un hospital entero es dotado o cuando recibimos fotos de cientos de niños siendo atendidos en un campamento humanitario.

 

Lo dijimos, la Ayuda Humanitaria entraría sí o sí y hemos cumplido, demostramos que si nos cierran una puerta, somos capaces de abrir mil ventanas por Venezuela, decidimos ser parte de la solución y en función de ello seguiremos buscando coordinar esfuerzos con todos aquellos que propicien soluciones.

 

Ahora imaginen, si con todos los obstáculos que ha puesto la dictadura en Venezuela, hemos logrado ingresar esta ayuda, ¿Cuánto podríamos lograr luego del cese definitivo de la usurpación y con eso, el ingreso de ayuda de manera libre, sin restricciones ni obstáculos? Arriba ese ánimo Venezuela, que nada ni nadie permee la esperanza.

 

Soñamos con organizar al mundo entero para salvar vidas y lo estamos logrando, soñemos ahora con lo que juntos podemos alcanzar.

 

Lester Toledo / @LesterToledo

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