Recientemente el representante del oficialismo Hector Rodriguez, afirmaba que las reuniones sostenidas con “las oposiciones” iban bien encaminadas, lo interesante de sus declaraciones más allá de los posibles acuerdos que se puedan estar negociando, en mi opinión irrelevantes porque estos han sido usado como estrategia de permanencia en el poder y no como voluntad de cambio, está el hecho de que el oficialismo reconoce, así como lo hizo Estados Unidos de que en Venezuela cohabitan varias oposiciones.
Ante su incapacidad para gobernar, divide y vencerás es la mejor carta para mantenerse en el poder, el oficialismo sabe en detalle quien es quien en la oposición y juega con sus debilidades para chantajear y manipular cualquier acción que ponga en peligro el poder, a esto sumémosle los actores opositores que se prestan al juego y tendremos configurado un laberinto difícil de resolver.
Sin embargo, lo que luce complicado se vuelve simple cuando hay voluntad de resolución, muchos han afirmado, entre ellos mi persona, que uno de los problemas que hemos tenido para salir del gobierno es la división de la oposición, hoy en día mantengo esta tesis, es imposible derrotar a un enemigo si este esta unido y quien pretende derrotarlo no lo está.
Por un lado tenemos a “la oposiciones” que piensan que pueden derrotar al gobierno desde el exilio a través del apoyo internacional, olvidando que sin actores internos eso no será posible, otros piensan que cohabitando con el gobierno este algún día les dará espacio de poder para algún día desplazarlos, tesis a mi modo de ver ingenua porque esto solo es posible en democracia, por ultimo tenemos a la oposición que apuesta por el golpe militar y la fractura interna gubernamental, sin tomar en cuenta que estos seguramente los dejaran afuera cuando tengan el poder, más aun con una oposición dividida, de tal manera que las oposiciones venezolanas, representantes seguramente del 90% de la soberanía popular, no saben qué hacer con una victoria cantada pero no cobrada, un laberinto con una salida cercana que los egos alejan.
Volvemos a tener una oportunidad de oro, el informe Bachelet vuelve a generar unas condiciones favorables para que “las oposiciones” terminen fundiéndose en una sola y obliguen al gobierno junto a la comunidad internacional a someterse a un proceso electoral que termine de desnudar la ilegitimad de este, no hay que tener miedo al fraude o a las manipulaciones que este pueda hacer, lo importante es salir del laberinto, que no es otra cosa que la capacidad que tengan “las oposiciones” de unirse y convertirse en una sola a través de una sola estrategia, después de eso la caída del gobierno estará cantada y con los días contados.
Jose Lombardi / @lombardijose