Santiago estará el lunes bajo preemergencia ambiental, una medida que restringe la circulación de vehículos cuando la contaminación del aire alcanza niveles altos, informó la Intendencia Metropolitana el pasado domingo.
La preemergencia, que ya se aplicó en otras oportunidades este año, se toma con el fin de «resguardar la salud de los vecinos» de Santiago y sus alrededores, informó el gobierno de la ciudad a través de su cuenta de Twitter.
La medida prohíbe la circulación de cerca del 20% del parque automotor retirando de las calles unos 300.000 vehículos. Además se impide a los hogares usar calefactores y cocinas a leña, y se paralizan fuentes industriales.
La geografía de la capital chilena, enclavada entre cerros y la imponente Cordillera de Los Andes, favorece en especial en invierno la acumulación de partículas en el aire. La situación se repite en varias ciudades del sur de Chile.
AFP