El primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, conversó este miércoles por teléfono con el presidente de Paraguay, Mario Abdo Benítez, para tratar los incendios de la Amazonía, así como la crisis de Venezuela.
La Oficina del Primer Ministro de Canadá señaló en un comunicado que los dos líderes «compartieron sus preocupaciones sobre los incendios en la cuenca de la Amazonía» y que el presidente paraguayo «expresó su profundo agradecimiento por la declaración de Canadá en apoyo de la región en el G7».
Al termino de la cumbre del G7 celebrada durante el fin de semana en Biarritz (Francia), Trudeau anunció que, aparte de la oferta de ayuda del G7 a Brasil para combatir los incendios, Canadá estaba dispuesto a ofrecer el envío de aviones cisterna y 15 millones de dólares canadienses (11,25 millones de dólares estadounidenses).
Ayer, la ministra de Medio Ambiente de Canadá, Catherine McKenna, reveló que Brasil había rechazado la oferta, pero que su país estaba dispuesto a trabajar con otros países de la región para combatir los incendios y sus efectos en el medioambiente.
«Hay otros países que están implicados y en estos momentos estamos proporcionando un modelo de dispersión aérea al Gobierno de Argentina. Esperamos que podamos trabajar con los otros socios», afirmó McKenna.
Por otro lado, Trudeau y Benítez «compartieron sus prioridades, incluida la respuesta a la crisis de Venezuela como parte del Grupo de Lima», agrega la nota.
Precisamente hoy, la ministra de Asuntos Exteriores de Canadá, Chrystia Freeland, se reunió en La Habana con su homólogo cubano, Bruno Rodríguez, para analizar la crisis venezolana.
Cuba es el principal aliado en la región del Gobierno del presidente venezolano, Nicolás Maduro, mientras que Canadá es uno de los impulsores del Grupo de Lima y ha reconocido al líder opositor Juan Guaidó como «presidente provisional» de Venezuela.
Freeland y Rodríguez se han reunido en tres ocasiones desde mayo para estudiar la situación en Venezuela.
Canadá ha incrementado sus acciones diplomáticas en los últimos meses con los principales actores de la crisis, incluido Estados Unidos, en busca de una solución.
EFE