Néstor Reverol, ministro para Relaciones Interiores, Justicia y Paz, aseveró que la muerte del presbítero Jesús Manuel Rondón Molina (47), en el estado Táchira, se debió a una venganza ejecutada por un joven que era víctima de abuso sexual.
En declaraciones a la prensa junto al director nacional del Cicpc, Comisario general Douglas Rico, Reverol indicó que el muchacho era abusado por el sacerdote desde la edad de los 14 años.
Al parecer la familia del joven entró en confianza con el sacerdote y seo lo aprovechó el ahora occiso para generar la relación con el chico que cansado de la situación decide matarlo.
En los interrogatorios llevados a cabo por el Eje de Homicidios del Cicpc – Táchira, el adolescente, de quien se mantuvo en reserva su identificación, explicó a los investigadores que el cura lo había amenazado de ejecutar abusos carnales a su hermano de 10 años si decidía delatar la oscura y perversa relación, expuso Reverol.
Rondón Molina se encontraba desaparecido desde la semana pasada cuando unas religiosas denunciaron su inasistencia los oficios católicos que acostumbraba ofrecer en un convento de la localidad Rubio, estado Táchira.
El mismo día que desapareció Molina fue asesinado ya que según relató el titular de justicia, el muchacho lo invitó a un lugar apartado y estando solos lo estranguló.
La captura del menor de edad se logró al analizar el cruce de llamadas recibidas por el sacerdote el último día de su vida.
Diario Contraste