Hay sangre en el piso, los baños no funcionan y no hay iluminación en los pasillos; así denunciaron pacientes que se encuentran el hospital Pedro García Clara de Ciudad Ojeda, en la Costa Oriental del Lago.
En el área de hospitalización, los familiares de los pacientes deben llevar hasta el agua para limpiar habitaciones y también los baños, mientras que hay camillas que dejaron de utilizarse porque están contaminadas.
Desde 2019 hay intermitencia en la distribución de agua en el estado Zulia, situación que afecta al centro de salud, donde surten con cargas de agua de camiones cisterna y no cubre con la demanda de las instalaciones.
Aunque hay áreas priorizadas, solo la unidad de diálisis, donde se atienden 72 pacientes renales, necesitan 10.000 litros de agua diarios para atender a 24 pacientes. Además de quirófano y sala de parto.
La administración del centro está a cargo del Instituto Venezolano del Seguro Social (Ivss), siendo el único de la Costa Oriental del Lago y atienden pacientes de Lagunillas, Valmore Rodríguez, Simón Bolívar, Baralt y hasta del estado Trujillo.
Los baños están clausurados, el olor a orine es fuerte y también se extiende a los pasillos, no hay agua para limpiar. Hay áreas que operan a medias por contaminación.
En el quinto piso, donde están los quirófanos, también hay desechos en los pasillos y rastros de sangre, denunció Antonio Valbuena, familiar de un paciente. Además, hay fallas de ventilación en algunas áreas, los aires acondicionados funcionan a medias.
Por su parte, Mariela Morese, otra habitante de Ciudad Ojeda, denunció que en el hospital hay bote de aguas negras, no hay agua y hay áreas contaminadas. “Dónde están las autoridades responsables, será que sus familiares no pueden llegar”, dijo.
Los pasillos están oscuros, la mayoría de los fluorescentes están quemados y aún no han sido sustituidos. Una de las pacientes explicó que durante la noche deben permanecer en las habitaciones.
El Pitazo