Internet puede ser un aliado en muchas cuestiones, pero también un peligro para nuestra salud. Así lo demuestran la cantidad de dietas milagro sin respaldo científico que podemos encontrar en las redes, las cuales son potencialmente peligrosas para nuestra salud.
Otro gran problema que encontramos es la abundancia de seudonutricionistas que se atreven a recetar dietas sin ningún tipo de preparación ni titulación. Algunos incluso se ofrecen a pasar consulta, pero no pueden hacerlo porque no son profesionales realmente no están colegiados.
En algunas páginas, además, recomiendan y venden productos adelgazantes que en muchas ocasiones son perjudiciales para la salud. Cuando notas que comienzas a bajar de peso te convencen para que los continúes consumiendo, lo que supone un riesgo y un engaño para el consumidor.
Estas dietas pueden provocar anemia por no comer suficiente hierro e incluso deficiencias patológicas que provocan a largo plazo intolerancias alimenticias. A todo esto, hay que sumarle el temido efecto rebote que provocan estas dietas milagro. En un mes puedes bajar un par de kilos y a los dos meses de dejar la dieta puedes recuperarlos o incluso subir de peso.
Los problemas psicológicos también son frecuentes en las personas que deciden realizar una dieta por la red. Ansiedad, sentimientos de culpabilidad aparecen cuando no se consiguen alcanzar las metas de peso que prometen en estas páginas.
Plantas no aptas para el consumo que prometen curar los problemas de salud
A veces las posibles curas de la enfermedad pueden ser peor que el problema. Ante una enfermedad como el cáncer muchas páginas web prometen soluciones que dicen poder curarlo. Un ejemplo de ello, es la argumentación del consumo de la planta conocida como Kalanchoe, introducida en nuestra dieta, puede llegar a sanarnos, cuando en realidad se trata de una especie que no es apta para el consumo.
El consumo del Kalanchoe puede generar obstrucción intestinal porque al llegar al intestino se hincha.
Hay dietas que dicen contrarrestar los efectos secundarios que provocan ciertos tratamientos. Uno de estos alimentos que recomiendan cuando se padece cáncer es la cúrcuma, que funciona como potente antioxidante. El problema es que parte de los efectos de la quimioterapia o radioterapia implican una mayor oxidación, por lo que el poder antioxidante de la cúrcuma puede estar impidiendo que el tratamiento funcione como es debido.
Movidos por la desesperación ante las enfermedades, muchos pacientes llegan a abandonar su tratamiento engañados por estas dietas y productos curativos que encuentran en internet. Y el problema principal de todo esto es el fácil acceso que tenemos a través de nuestros dispositivos, a un solo clic de ratón de nuestro ordenador o mucho más accesible a través del móvil. Por eso debemos saber que las únicas dietas válidas son las que recomiendan los profesionales de la nutrición, que serán en todo caso, seguras y controladas.
RTVE