El pequeño Julio Rangel, de 11 años de edad, falleció la noche del miércoles 29 de enero en el área de hematología del hospital J.M. de los Ríos, en Caracas.
De acuerdo con la Organización No Gubernamental Prepara Familia, Julio era uno de los 39 niños que esperan por un transplante de médula ósea en el centro hospitalario, que están amparados por medidas cautelares de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.
“Es el primer niño que fallece en el 2020 en hematologia del Hospital J.M. de Los Rios”, publicó la organización por medio de su cuenta en Twitter, desde donde envió condolencias y un abrazo a sus familiares”.
La institución hizo un llamado a que sea reactivado el programa de transplantes y destacó que Julio Rangel era un niño muy querido en el hospital.
“Julio Rangel era uno de los niños más queridos de hematología, falleció esperando un trasplante de médula. ¿Cuántos niños van a tener que fallecer para que el Estado decida invertir en las unidades de trasplante de médula ósea? Reactiven los transplantes”, reza el tuit.
El hecho ocurre apenas una semana después de que un grupo de madres y familiares se concentraran en protesta frente a las instalaciones del hospital exigiendo dotación de insumos y mejoras en la calidad de atención.
“Le pedimos a los entes gubernamentales que se dediquen a resolver la problemática para que todo esto funcione bien y ellos puedan recibir su quimioterapia, porque el cáncer no espera”, dijo en ese momento Patricia Dalberto, madre de uno de los menores.
Radio Fe y Alegría