El primer ministro tailandés Prayuth Chan-ocha instó el martes a la gente a cerrar los grifos y ducharse menos para hacer frente a la sequía que afecta al norte y centro de Tailandia.
La semana pasada, la autoridad de gestión del agua de Bangkok dijo que el agua del grifo de la capital se estaba volviendo salina a medida que el agua de mar subía por el agotado río Chao Phraya, fuente de gran parte de los recursos hídricos del centro de Tailandia.
El gabinete acordó el martes gastar 3.000 millones de bat (100 millones de dólares) en perforaciones y tuberías para extraer agua subterránea con el fin de aliviar una sequía que previsiblemente empeorará en los próximos meses, dijo a la prensa una portavoz del Gobierno.
La temporada seca de Tailandia comenzó en noviembre y suele durar hasta abril, aunque este año las autoridades dicen que podría continuar hasta junio. Se ha declarado una sequía en 14 provincias de las regiones agrícolas del centro, norte y noreste.
“Por favor, contribuyan todos a ahorrar agua. Cierren todos los grifos. Usen menos agua”, dijo Prayuth. “Reduzcan el tiempo de cepillado de dientes y de ducha a un minuto.”
Con los bajos niveles de los embalses, el Gobierno también ha pedido a los agricultores de algunas provincias cercanas a la cuenca del río Chao Phraya que no cultiven arroz fuera de temporada.
Reuters