Unos 120 habitantes indígenas en la cuenca Apón de la Sierra de Perijá sufren de paludismo, denunció el cacique de la comunidad Sherepta, Leonel Romero.
Romero informó a Radio Fe y Alegría Noticias que entre los afectados se cuentan hombres, mujeres y niños. Además, destacó que la enfermedad representa un riesgo para otras comunidades indígenas cercanas debido a las condiciones selváticas de la región.
Según el cacique, los indígenas Yukpa “parecen sus propios médicos”, debido a que no cuentan con los recursos para trasladarse a los centros asistenciales urbanos, por lo que acuden a “la casa de malariología” en Machiques, donde les hacen el diagnóstico.
Romero aseguró que la situación se complica debido a las características climáticas de la región, donde la humedad y la abundante vegetación contribuyen con la proliferación del mosquito transmisor de la enfermedad.
Además, los técnicos especialistas en fumigaciones no pueden atenderlos, a pesar de tener la disposición y los insumos, porque no cuentan con vehículos aptos para visitar las comunidades indígenas.
Por otro lado, las autoridades de salud indígena hacen esfuerzos por atender a estas comunidades remotas, haciendo constantes visitas de manera recurrente para llevar insumos y medicinas.
Sin embargo, en el caso del paludismo precisamente las limitaciones de transporte hacen la labor cuesta arriba.
Radio Fe y Alegría Noticias