El personal médico de las clínicas de PDVSA Norte, Sur y Campo Rojo, de Lagunillas, en la Costa Oriental del Lago, denunció que no recibe suministro de gasolina para trasladarse a sus sitios de trabajo.
Una fuente que pidió el anonimato reveló que estos profesionales de la salud se encuentran “en total desamparo y pasando la peor calamidad para poder cumplir con nuestro compromiso con los pacientes” por falta de combustible para movilizarse.
Aseguró que “PDVSA tiene un suministro interno de gasolina, dirigido por Luis Torres, pero no nos aportan ayuda”.
Además, dijo que “la gerencia de transporte de PDVSA colocó un bus para nuestros trasladados, pero nunca pasa”.
“Y en las bombas, siguiendo instrucciones del alcalde Loenidas González, alegan que nos pueden despachar solo dos carros por día, pero llegamos a las 10.00 de la mañana y salimos a las 5.00 y 6.00 de la tarde con los tanques vacíos”, denunció la fuente.
Sin embargo, los facultativos de PDVSA en Lagunillas observan que a sus colegas de las clínicas privadas Unidad Médico Intregal Ojeda (Umioca) y del Centro Clínico Médicos Asesores, así como también a los del hospital Pedro García Clara, “sí les echan gasolina a todos, cuando tienen una lista de 40 vehículos y la de nosotros no llega ni a 40, porque los que viven en Cabimas no pueden venir por falta de combustible”.
“El alcalde dice que nosotros no estamos bajo su responsabilidad”, resaltó el informante, “cuando el nuestro es también un servicio público, atendiendo a nuestros pacientes, que no tienen la culpa que los entes políticos no nos quieran surtir gasolina”.
En ese sentido, enfatizó que los centros asistenciales donde trabajan son hospitales tipo 2, de atención a las comunidades, con manejo de todas las áreas, quirúrgica, uci, medicina interna y general, y también emergencia, las 24 horas.
“Por eso, pedimos ayuda, nos sentimos desamparados, pedimos que nos abandonen”, recalcó la fuente.
La Verdad