Las autoridades de Montenegro detuvieron a ocho sacerdotes de la Iglesia Ortodoxa Serbia luego de que varios miles de personas asistieron a una procesión religiosa a pesar de la prohibición de celebrar reuniones por el nuevo coronavirus.
La fiscalía dijo el miércoles que los religiosos enfrentaban cargos por violar la normativa sanitaria durante la pandemia del coronavirus al organizar la procesión en la víspera en Niksic, una localidad en el oeste de país.
Los fieles que participaron en el acto no llevaban mascarillas ni guardaron la distancia de seguridad.
Los arrestos podrían avivar las tensiones entre el gobierno montenegrino y la iglesia, que antes este año provocaron semanas de protestas contra una ley religiosa que dice que despojaría a la institución de sus propiedades.
Montenegro, que tiene una población de 620.000 personas, reportó nueve decesos por el nuevo coronavirus y más de 300 infectados.
AP