La producción de crudo de Venezuela fue de 687.000 barriles el sábado pasado, frente a los 653.000 barriles el viernes, pero por debajo de 718.000 barriles por día (bpd) que reportó el país en marzo, según documentos vistos por Reuters el lunes.
La caída se produjo cuando la producción en la faja petrolífera del Orinoco, donde se encuentran los más grandes depósitos de crudo pesado del mundo, bajó en casi 100.000 bpd de hace tres semanas a 307.000 bpd el sábado, de acuerdo a dos documentos internos de la estatal Petróleos de Venezuela.
Una serie de incendios forestales han golpeado recientemente los tanques de almacenamiento y las estaciones de bombeo en la faja, obligando a algunas áreas a detener temporalmente la producción.
La semana pasada, un incendio golpeó el Centro Operativo Morichal, en el sur del estado Monagas, que recibe crudo de múltiples pozos en la faja del Orinoco. Debido al daño causado por el fuego, la instalación no pudo bombear petróleo a la siguiente estación.
El incidente obligó a PDVSA a detener la producción de los proyectos que envían crudo al complejo Morichal, incluida la empresa de capital mixta Sinovensa con la CNPC de China, Petrocarabobo con la española Repsol y la empresa Petroindependencia con Chevron, dijeron las personas que hablaron en condición de anonimato. PDVSA ostenta la mayoría accionaria en todas las compañías.
La situación provocó que un tanque de almacenamiento se desbordara durante el fin de semana, según cinco personas familiarizadas con el incidente y un video visto por Reuters.
PDVSA no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios; Chevron declinó comentar el asunto, y Repsol y CNPC no respondieron de inmediato a solicitudes para referirse al tema.
La producción de petróleo de Venezuela ha disminuido en más de un 20% en lo que va de año, en medio de las sanciones de Estados Unidos a PDVSA y sus principales clientes, como parte de un plan para presionar la salida de Nicolás Maduro. Las exportaciones también disminuyeron en marzo a su nivel más bajo en siete meses, lo que disparó los inventarios.
Pero la combinación de una menor producción de crudo y mayores exportaciones el mes pasado, permitió a PDVSA reducir sus crecientes inventarios. Según la firma de inteligencia de mercado Kpler, Venezuela tenía unos 35,8 millones de barriles almacenados a finales de abril, unos 2 millones de barriles menor que el mes previo.
La caída de la producción de la faja se produjo cuando el bombeo en la región occidental cayó a 216.000 barriles el sábado y 181.000 barriles el viernes, en comparación con 225.000 barriles del 11 de abril, según los documentos.
La región oriental de Venezuela, cuyos campos de crudo liviano son operados principalmente por PDVSA, opera relativamente estable, produciendo 154.600 barriles el sábado y 162.700 barriles el viernes, en comparación con 157.000 barriles el 11 de abril.
Reuters