La imprenta llega tardíamente a la Capitanía General de Venezuela, después de haberse instalado en varios Virreinatos de esta América Hispana. En 1808 aparece la Gazeta de Caracas, el primer periódico de nuestra historia nacional y no registra, mujeres en la redacción capitalina.
Sin embargo, avanzada la medianía de aquel s.XIX, dos mujeres en Maracaibo, se convierten en pioneras del oficio. Escribir para la prensa. Fue un ejercicio anticipado de periodismo especializado, con artículos dedicados a temas literarios. En 1864 “El Rayo Azul “con esta temática, difundía la cotidianidad marcado por estas tertulias de la ciudad circundada por el Lago, asimismo, azul pero en sus aguas.
En Caracas, unos años después, en 1872 se publica “Ensayo Literario” redactado por Isabel Alderson, los textos literarios incluyen ciencia y filosofía. Se fortalece y desarrolla bajo este ejercicio, el periodismo femenino. Algunas de estas redactoras, habían estudiado en Europa y traían en su visión comunicativa, los avances tecnológicos de la prensa del momento, como la imprenta a vapor que se instala en poco tiempo en la capital venezolana.
En paralelo, la provincia sigue enriqueciendo las actuaciones comunicacionales y en Mérida, se edita en 1882,la “Revista Escolar”.
En 1884, se incorporan Valencia con la “Primera Piedra “redactado por María de la Paz Pérez de Santander.Su contenido literario guardaba, relación con las anteriores publicaciones de Maracaibo, Caracas y Mérida.
Caracas, retoma en 1891 su condición capitalina y publica “El Ávila” también de corte literario bellas artes y lo novedoso fue la publicación de avisos. La misma, estuvo dirigida y redactada por Concepción Acevedo de Taylhardat
La moda, abraza a las caraqueñas. Imágenes llegan desde Europa, que contaba desde 1858 con el cable submarino y facilita a las modelos acicaladas en sus redondos y apretujados corpiños, imprimir una revista especializada en este ámbito; “La Lira”. Se había adelantado a las revistas femeninas del s. XX como; Páginas y Cosmopolita entre otras.
Casi al término de aquella centuria, generosa en impresiones literarias, nace una importante publicación del periodismo de humor. Entintado con las últimas técnicas de impresión europea, aparece en1892 en Caracas el “Cojo Ilustrado”. Contó con las redactoras; Magdalena Seijas, Virginia Gil de Hermoso y Polita de Lima de Castillo.
El periodismo y su literatura en manos femeninas era la sobrevivencia de mujeres marcadas por la opresión del pueblo y la expresión homogénea de las carencias de libertad de expresión en este país de caudillos usurpadores. Una sola línea observamos en todas las instancias de las publicaciones; la literatura.
Juan Vicente Gómez, había gobernado el país con mano de hierro. Por más de 30 años mandó más que gobernar y sus actuaciones fueron demoledoras.Su muerte, da paso a figuras inéditas en la política quienes se convirtieron en piezas vitales de la nueva Venezuela.
En este reinicio de modernidad del estado venezolano, asolado por el tirano opresor, destacan otras periodistas. Eleazar López Contreras, presidente de la transición baja un poco la mordaza a la libertad de expresión y permite avanzar para consolidar este derecho natural. Las mujeres, alimentan el diarismo con otra visión. Sus actuaciones son fundamentales entre los años 1936- 1948.
Queda atrás el periodismo de censura escapado a través de la literatura para drenar la represiòn.Surge y destaca en esta dimensión, Mercedes Pérez, periodista, nacida en Barquisimeto y formada en Londres y Paris. Logró entrevistar a la caída de Isaías Medina Angarita, derrocado por Pérez Jiménez, a los militares comprometidos con aquella asonada. La finalidad era publicarlo en “La Esfera”Cuestión que logró. Y publicó lo recopilado en las entrevistas enreportajes políticos que llamó; “La Verdad Inédita”.
En 1942 Ultimas Noticias, asume el compromiso nacional de inicios renovadores de libertad con destacadas periodistas; María Teresa Castillo, quien se graduará en la recién creada Escuela de Periodismo de la UCV por esos mismos años. Se casò con Miguel Otero Silva, fundador para aquellos años de El Nacional y trabaj a su lado como profesional del periodismo.
En otro diario; El País, aparece una de las personalidades más descollantes del periodismo del momento; Ana Luisa Llovera. Con ella, Carmen Clemente Travieso, Josefina Calcaño. Como reporteras suben a las barriadas caraqueñas y dan paso nacionalmente al periodismo social. Grandes cambios y grandes nombres, para escribir la historia del periodismo venezolano en momentos de asomo de libertad.
Oscar Yánez, de crónicas caraqueñas impecables, de entrevistas envidiables y del sigilo suficiente para llegar al meollo de la noticia, fue compañero en Ultimas Noticias de algunas de esas damas. Destacó el papel asumido por ellas, quienes imprimieron en la redacción del diario la solidaridad y otros valores que sostuvieron al diarismo del momento. Dejaron su impronta en la primera redacción de un diario con olor a mujer, escribió posteriormente.
Asimismo, esas mujeres, saltaron de los barrios caraqueños a los sucesos, deportes y economía.
En el Premio Gabo, instituido por García Márquez y entregados en Cartagena a finales del pasado año, un equipo de periodistas de la página, Efecto Cocuyo, dirigida por Luz Mely Reyes, se hizo merecedor del galardón “Mujeres en la Vitrina” que trata la migración en medio de la trata zonadivas info. El galardón fue Mención Innovación.
Eneida Valerio Rodríguez