El gobierno estadounidense de Donald Trump anunció el viernes una norma que permite que los médicos se nieguen a practicar abortos y rechazar cirugías de reasignación de género para los transexuales.
La nueva norma, anunciada por el Departamento de Salud, afecta a los médicos, hospitales y compañías de seguros que reciben fondos federales.
La nueva regulación sustituye otra norma que aprobó en 2016 el expresidente Barack Obama. Por primera vez en la historia se incluyó en esta regulación una definición amplia del género, que podía ser hombre, mujer, ninguno o una combinación de hombre y mujer.
La iniciativa de Trump considera que el género es hombre o mujer definido por la biología. La regulación que aprobó Obama para prohibir la discriminación no llegó a entrar totalmente en vigor.
En diciembre de 2016 un juez de Texas suspendió la medida, por lo que el anuncio de Trump tiene un gran contenido simbólico y busca satisfacer su base electoral de la derecha cristiana.
La norma de Trump sí otorga protecciones legales a aquellos doctores que se nieguen a atender a pacientes transexuales y que no quieran practicar abortos, con base en sus creencias.
La regulación deja además sin protección a aquellos pacientes que no hablan inglés, que ya no tendrán derecho a un traductor. Afecta también a las personas con discapacidad que no podrán reclamar al hospital ayuda para acceder a sus instalaciones.
Perjudica a quienes tienen dificultades para ver y oír porque no tendrán derecho a la tecnología necesaria para entender al médico.
El Nacional