Ante la mirada indolente de sus autoridades y compasiva de muchos de sus trabajadores, las instalaciones donde funciona la sede de Pdvsa División Boyacá en Barinas, ofrece en la actualidad su peor cara a los escasos trabajadores y visitantes que acuden a ese recinto, venido a menos desde todo punto de vista.
Al pasar por frente de la infraestructura, que otrora era sinónimo de disciplina, orden y, hasta cierta opulencia, hoy día desde su entrada con una fachada descolorida y rasgada, el público en general se da cuenta y observa con tristeza la primera impresión de en lo que se ha convertido, prácticamente un “cascaron” sinónimo de inoperancia, olvido y soledad.
A muchos de los trabajadores de la estatal petrolera, ciertamente la crisis del país y los bajos sueldos, los obligó a emigrar a otras latitudes en busca de un mejor porvenir, sin siquiera preocuparse por esperar “el arreglo” que, actualmente se convertiría en sal y agua debido a la hiperinflación descontrolada reinante en el país.
Desde dentro, los pocos trabajadores que aún pululan como zombies por sus instalaciones, esbozaron con cierto dejo de tristeza que, en su interior se ocultan celosamente cerca de 150 vehículos desvalijados, oficinas saqueadas y desmanteladas, mientras el negocio de los lubricantes y combustibles si luce “al máximo”.
También trabajadores preocupados por el actual panorama de la que aún llaman “nuestra empresa”, informaron el triste cuadro reinante en la, hasta hace poco prolífica estatal petrolera, por cuanto señalan que solo dos cuadrillas de trabajadores van al campo diariamente en horario de 10 am a 6 pm y pasan el tiempo practicando cualquier actividad lúdica que les sirva para pasar el rato y cumplir su jornada laboral.
Exámenes y atención médica, el recordado “comisariato” y otros beneficios que percibían sus trabajadores en “la cuarta”, son parte de la historia que aún añoran, quienes están fuera y dentro de la empresa y que se resisten a ver la destrucción a la que ha sido sometida Pdvsa por parte del Ejecutivo Nacional a lo largo de estos veinte años.
La Noticia de Barinas