Este miércoles, Molly de la Sotta, hermana del capitán de navío, Luis Humberto de la Sotta, exigió a la comisión de la Alta Comisionada de Derechos Humanos, Michel Bachelet acompañe a los familiares a la sede de Dirección de Contrainteligencia Militar (Dgcim) para pedir fe de vida de los presos políticos, “para verlos, para ver en qué condiciones están y para llevarles alimentos”.
Explicó que debido a la emergencia sanitaria a consecuencia del COVID-19, las visitas a los presos políticos están suspendidas. “Tenemos 138 días sin tribunales, sin visita de abogados, sin visita familiar”, dijo Sotta este miércoles en entrevista con la periodista Mariana Reyes.
Además denunció los tratos que reciben no solo los militares detenidos, sino también civiles. “En ese sótano no tienen luz del sol ni aire natural. Les abren la puerta una vez a la semana para que tengan una ducha”, explicó.
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