El patrocinador principal del estadio de los Redskins de Washington dijo el jueves que quiere que el equipo de la NFL cambie su nombre.
“Hemos comunicado al equipo en Washington nuestra solicitud de que cambie el nombre del conjunto”, informó FedEx en un comunicado.
La compañía pagó al equipo 205 millones de dólares en 1999 por los derechos del nombre en el estadio FedEx Field en Landover, Maryland.
Además del nombre del estadio y un acuerdo de patrocinio, el director general de FedEx, Frederik Smith, es dueño minoritario del equipo.
En tanto, el propietario mayoritario Daniel Snyder no ha dado indicios de que cambiará el nombre desde que adquirió la franquicia en 1999.
En medio del debate a nivel nacional sobre el racismo, la presión ha ido al alza en la organización para abandonar el nombre de Redskins, que significa “pieles rojas”. Expertos y defensores de derechos han descrito el nombre como un “insulto racista, definido por el diccionario”.
Los inversionistas escribieron esta semana a FedEx, PepsiCo y a otros patrocinadores, pidiéndoles solicitar un cambio. Se cree que FedEx es el primero en responder con medidas.
El jueves por la noche, Nike pareció retirar todos los artículos de los Redskins de su tienda en internet. Los otros 31 equipos aparecían mencionados, pero una búsqueda de Washington no arrojó resultados.
Nike no respondió de inmediato a un correo electrónico en que se solicitaban sus comentarios sobre la situación.
Recientemente, cuando se le preguntó si Snyder sopesaba la posibilidad de cambiar el nombre, un portavoz dijo que el equipo no tiene comentarios al respecto. La semana pasada, el conjunto retiró el nombre del fundador racista George Preston Marshall de su Anillo del Honor en el FedEx Field, y un monumento a ese individuo fue retirado del sitio del antiguo estadio RFK.
La alcaldesa de Washington D.C. Muriel Bowser señaló también que el nombre era un “obstáculo” para que el equipo regresara al Distrito de Columbia. El contrato de arrendamiento del equipo en el FedEx Field expira en 2027, y todavía se encuentra en negociaciones con Washington, Virginia y Maryland sobre la construcción de un estadio nuevo.
AP