REFLEXIONES| ONU: Honestidad, protección, respeto. Por Luis Acosta
Después de la Segunda Guerra Mundial ganada por los países aliados, los países triunfadores, y principalmente, los más importantes e interesados encabezados por los Estados Unidos mas China, Rusia, Francia, Reino Unido y cuarenta y cinco más, se reunieron para meditar sobre lo que tenían que enfrentar hacia el futuro y, sobre todo, como llevar las relaciones entre las naciones y organizar una especie general de dirección que permitiera dirimir las divergencias a plena civilización, evitar los conflictos que se presentan y/o resolverlos a primera instancia.
De suerte que el mantenimiento se financiaría con la colaboración de todos los miembros quienes pagarían cuotas de acuerdo al volumen y tamaño de sus economías atendiendo a un algoritmo de prorrateo diseñado para ese fin. Así que Inglaterra, Francia, Rusia y la China y USA, además de ser los países fundamentales en la creación de la institución, cargaban con la mayor parte de ese presupuesto a ejecutar. Ellos compensaron ese hecho con la creación del Concejo de Seguridad donde, por estatutos, forman parte como miembros permanentes con votos especiales de censura a las decisiones. Así se manejaron los acuerdos en los primeros años y décadas, sin malicias, ni preferencias pero con orden y respeto. Todo para ir al compás de las dificultades. Pues bien, así nació la Organización de las Naciones Unidas bajo la iniciativa patronal de los Estados Unidos y del fenómeno político de ese momento histórico Franklin Delano Roosevelt, viejo político y preparado estadista, promotor del New Deal en su país, ganador de la II Guerra Mundial junto a Winston Churchill, el hombre de la famosa frase hacia la eternidad “para ganar la guerra necesitamos derramar sangre, sudor y lagrimas”. Hoy, cercanos ya a cumplir 75 años de existencia, la cantidad de países parte de la institución se ha multiplicado por cuatro ya que ahora son 193 países miembros.
Con la construcción del edificio de las UN con sede en New York, la organización se consolidó como la institución sede de las naciones del mundo de manera solida y prestigiosa, con sus defectos y sus virtudes, con sus altos y sus bajos, pero con un rápido crecimiento. Así surgió en 1948 la OMS (Organización Mundial de la Salud) y otras muchas instituciones colaterales usadas por la ONU para gestionar las diferentes actividades relacionadas con sus objetivos. Mas el mundo se ha complicado y cada día aparecen distintos problemas. En adición, algunos dirigentes tropicales, llenos de incomodidad y de tener poco poder, a la larga no estuvieron de acuerdo y empezaron a ver la institución como un ente político y los políticos se dieron a la tarea de llenar de propósitos maliciosos las membrecías a sabiendas de que del control de los votos se podía arribar al control de las especificidades y del nombramiento grupal e interesado del Secretario General. El asunto ha llegado a tanto, que el Presidente Trump ha señalado que los chinos sacaron ventajas de la extracción pública del tema Coronavirus, echándolo a andar fuera de todo control hacia afuera de China y, con tremenda malicia hacia el territorio norteamericano. De allí la decisión Trump de retirar el pago de su aporte y apoyo general de los Estados Unidos a la institución.
Entonces, precisamente, aquellas decisiones políticas deben ser erradicadas, así como también, el uso de los votos de la Asamblea de la ONU para ser aprovechadas con malicia y obtener ganancias en mala lid; o, como en el caso de Venezuela, en donde un grupo de nativos aceptó la invasión del país por parte de militares y milicianos de otras naciones (rusos, iraníes, cubanos, turcos, colombianos y chinos); les cedió, de facto, que tomaran el mando del país, mientras los nativos son maltratados y obligados a pasar hambre y abandono. En el ínterin, la ONU ha sido incapaz de proceder correctamente por causa del cálculo político de quienes tienen el control de la institución. Así pues, la ONU, nacida para lo grande, la quieren volver chiquita y los principios de su formación, producto de la guerra y sus circunstancias, quieren llevarla a lo peor de su existencia.
Pero la ONU está pensada para grandes cosas y acontecimientos. También para buscar su multiplicación de influencias en lograr un perfil de unidad, perfecta armonía y equilibrio para ser capaz de obtener el mejor resultado del peor problema y tener un símbolo de confianza tan fortalecido por la fe en cada servicio que nadie dude de su comportamiento adecuado e inteligente dándole a cada quien lo que le corresponde.
Luis Acosta