La crisis e inflación actual que vive Venezuela ha hecho que cada vez más el venezolano y el zuliano tengan menos para comer, lo que ocasiona que más personas sin oportunidades se quiten la “pena” y salgan a pedir.
Por las calles urbanizadas se puede ver un desfile de personas de todas las edades durante todo el día. Llaman a las puertas, de casa en casa, y piden dinero, comida u ofreciendo limpiar el frente o vender algún producto.
Muchos alegan que no tienen nada para comer, otros piden dinero para medicamentos y algunos más buscan hacer algo para ganar un poco de dinero, pero lo recabado usualmente no les alcanza ni para comprar un plátano.
“Mija no tendrá algo para comer, mis nietas no han comido nada, de verdad me da pena estar así pero se me agotaron las opciones”, expresó una señora con pena en su rostro en el frente de la casa de Julia Rincón, habitante de San Francisco.
“A diario llaman entre tres y cuatro veces para pedir comida, alguna ayuda u ofrecer limpiar los patios. Lo mas triste es que uno esta igual, solo tiene una casa que logró obtener cuando se pudo, pero vacía la nevera. No puedo ofrecerles nada si yo tampoco tengo”, añadió Rincón.
Por su parte, Luisa Pérez expresó que la mayoría que pide son niños y ancianos. “Muchos niños y viejitos se ofrecen a botar la basura por algo de comida. Es triste no tener ni siquiera para darles algo, cada vez la situación es más dura. Ellos a veces creen que uno es mala persona pero la realidad es que todos estamos igual”.
La basura es una opción
Suena inhumano, pero los depósitos de basura en la calle siguen siendo una opción para quienes carecen de todo. Muchos perdieron hace meses el pudor de alimentarse de desechos.
Se ocupan más de esta labor los hombres adultos de mediana edad y los ancianos. Aunque también se ha hecho frecuente observar madres acompañadas de hijos pequeños, todos esculcando en la basura.
Muchos venezolanos alegan que la situación cada vez es mas insostenible, muchos añoran volver a la “normalidad” para tener un poco de paz, Sin embargo temen el futuro en el país ya que lo ven incierto.
Por otra parte, los elevados costos de los alimentos y la poca productividad de las personas hacen que cada vez menos alimentos vayan a la mesa de los ciudadanos, lo que podría ocasionarles futuras desnutriciones.
La Verdad