Estados Unidos superó el domingo los 5 millones de casos de coronavirus y se mantiene como el país más afectado por la pandemia seguido de Brasil que acumula más de 100.000 muertos.
La Covid-19 mató a más de 162.000 personas en territorio estadounidense donde la curva de contagio está en alza desde finales de junio. La cantidad de nuevos casos llegó a 70.000 por día a mediados de julio.
Para ayudar a los millones de personas golpeadas por el desempleo o en riesgo de ser expulsadas de sus casas por no poder pagar la renta, el presidente Donald Trump decretó nuevos subsidios y medidas de apoyo a los que sufren las penurias económicas causadas por la pandemia.
Pese a lo elevado de las cifras, miles se subieron a sus motos y se lanzaron a las rutas rumbo al Medio Oeste para participar en la mayor concentración de motociclistas del mundo. «Sobreviví al coronavirus», dicen camisetas alusivas a la evento.
El segundo país más golpeado del mundo es Brasil que tiene más de 3 millones de contaminados entre sus 212 millones de habitantes. El domingo, la cantidad de muertos era de 101.049. Y esos datos están siendo cuestionados por expertos que consideran insuficiente la cantidad de tests que se realizan.
En los últimos siete días, prácticamente uno de cada dos decesos, ocurrió en América Latina.
Perú, el segundo país de la región más castigado después de Brasil, anunció el domingo 228 decesos en 24 horas; lo cual constituye un récord. Desde que el virus llegó a Perú en marzo hubo más de 478.000 contagios y 21.072 muertes.
Para América Latina los efectos económicos son arrasadores. En Ecuador unas 700.000 se quedaron sin trabajo desde el comienzo de la epidemia.
Desde que comenzó la pandemia en China en diciembre se registraron unos 728.000 decesos y más de 19,7 millones de casos de contagio en el mundo, según un recuento de la AFP, basado en las cifras oficiales de cada país.
Ola de calor en Europa
En Europa, una ola de calor ha llevado a que los habitantes se lancen a las playas poniendo a prueba la prevención contra los rebrotes de coronavirus.
Las autoridades europeas tratan de hacer cumplir las medidas de distanciamiento y el uso de mascarillas para evitar la propagación del virus, en un verano con temperaturas que superan los 35ºC en la mayor parte del continente.
Con más de 213.000 muertos, Europa es el segundo continente más afectado por la pandemia, solo por detrás de América Latina y Caribe, donde los muertos superan los 218.345.
La mayoría de los países del Viejo Continente había dejado atrás el confinamiento en mayo, pero los rebrotes volvieron a surgir a partir de julio.
Estos nuevos brotes obligaron a adoptar nuevas restricciones en plenas vacaciones veraniegas, ante las reticencias de una parte de sus habitantes, especialmente los más jóvenes, y en detrimento de una maltrecha economía que en buena parte de los países más afectados es muy dependiente del turismo.
Prohibición en playas de Bélgica
Varias ciudades y estaciones balnearias de Bélgica, situadas en el litoral flamenco, anunciaron este domingo la prohibición de «turistas de un día».
Esta medida, adoptada en las localidades de Knokke-Heist y de Blankenberge, se produce tras los enfrentamientos el sábado entre turistas y la detención de veraneantes en una de estas ciudades.
En Reino Unido y Alemania, el litoral también se llenó de gente y las autoridades alemanas tuvieron que exigir el cierre de lagos y de algunas playas en el norte del país.
Unas 5.000 personas se manifestaron el sábado en Viena para exigir que se levanten las restricciones por la crisis sanitaria y más ayudas del gobierno a bares y discotecas.
Desde finales de julio, el uso de la mascarilla resulta obligatorio en los espacios públicos cerrados en buena parte de los países del Viejo Continente.
AFP