La Gobernadora del Táchira, Laidy Gómez, recibió este lunes en su despacho la visita del coordinador humanitario adjunto a la Oficina de Naciones Unidas en Venezuela, Samir Elhawary, a quien le manifestó su preocupación por la atención que reciben las personas que ingresan por la frontera y que son llevadas a los Puntos de Atención Social Integral (PASI), implenentados por el régimen para la cuarentena de los connacionales.
«Los PASI se están convirtiendo en una cadena de contagio y programación masiva de la COVID-19, debido a que los resultados de la prueba PCR que se les realiza a las personas que ingresan al país por los municipios fronterizos son recibidos a los 30 días, tiempo en el que tienen que convivir con otros ciudadanos en similares condiciones, expuestos a toda clase de penurias», argumentó.
Gómez explicó que durante este lapso, quienes se encuentran en los PASI pueden resultar contagiados a través de las personas que están asintomáticas y permanecen a la espera de los resultados de la prueba.
«Esta situación ha generado una cadena de contagio masivo hacia el interior del país y, dentro del estado Táchira, ha sido una de las razones principales del incremento de casos en la entidad». afirmó la mandataria.
Reiteró ante el representante de la ONU que se exija a las autoridades del Ministerio de la Salud la modificación de los protocolos de seguridad, a fin de garantizar mejor atención a los pacientes y preservar la salud de los tachirenses.
La Prensa de Táchira