La Juventus está fuera de la Champions. El Lyon le eliminó gracias, sobre todo, a un penalti que marcó el partido. Un penalti mal señalado por el colegiado. El 0-1 (minuto 12) hizo imposible la remontada, pese a los dos goles posteriores de un inmenso Cristiano Ronaldo, que a punto estuvo de hacer el milagro.
La primera parte estuvo definida, a falta de juego, por la desastrosa actuación del árbitro alemán Zwayer, el peor del partido con diferencia. El colegiado perjudicó gravemente a la Juventus con un penalti ‘inventado’ tras una entrada limpia al balón de Bentancur. El alemán ni siquiera lo vio en el monitor y el VAR, por la dichosa manía de no entrar en situaciones grises, no removió su decisión. Un penalti ridículo que ponía las cosas muy de cara para el Lyon, pues Depay transformó su sexto gol en seis partidos seguidos en Champions.
El VAR también debe ser revisado en Europa, al menos en lo que a rectificaciones se refiere. No pasa nada por que el árbitro vaya a ver su jugada al monitor. Aunque sea gris. No pasa nada, aunque sea gris, por que el VAR corrija al colegiado. Si está la herramienta, ¡úsenla!
Este penalti de risa hizo que la Juve estuviera despistada bastantes minutos. Pese a ello, Cristiano tuvo una ocasión de cabeza; Bernardeschi hizo un jugadón que no entró de milagro; Cristiano volvió a fallar de falta en el 39’… hasta que llegó el segundo penalti ‘inventado’ por Zwayer, esta vez para la Juve, por unas manos pegadas, interpretables, de Depay. Una compensación en toda regla. Pero ya parecía tarde para la Juve. Cristiano marcó su gol 47 de la temporada en ese penalti, pero la ‘Signora’ tenía por delante sólo la segunda parte y dos goles que hacer. Demasiado.
Pero para Cristiano no hay nada imposible. En el 60′, un balón intrascendente en el borde del área, y ¡zas!, zurdazo de CR7 para el 2-1 y abre de nuevo la esperanza para una Juventus que tenía media hora por delante para revertir la situación. Gol número 48 de Cris en todas las competiciones esta campaña.
A partir de ahí, el partido se paró un poco, hasta que a falta de 15′, de nuevo se revolucionó. Entró Dybala, que ha estado lesionado, pero tampoco pudo hacer el tercero. El argentino duró apenas un cuarto de hora en el campo, pues se resintió y se fue lesionado de nuevo. Nadie fue capaz de llevar ese tercer gol… y la Juve queda fuera contra pronóstico.
Así termina su temporada la Juventus. Con su noveno Scudetto seguido, sí, pero con un mal final de campaña: sólo ganó dos de sus últimos ocho partidos en Serie A, que la venció con sólo un punto de ventaja con respecto al Inter; perdió la final de Copa ante el Nápoles; y está fuera de Europa contra el Lyon. No es suficiente para un equipo con Cristiano Ronaldo, que a punto estuvo ayer de hacer otro milagro, como ante el Atlético hace un año. Y Sarri, su entrenador, queda tocado, pese a ese Scudetto.
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