Frente a un Indianapolis Motor Speedway completamente vacío, Takuma Sato logró el domingo su segundo triunfo en las 500 Millas de Indianápolis en un final extraño y anticlimático del “Mayor Espectáculo del Automovilismo”.
Sato mantuvo a raya a Scott Dixon y se enfiló al triunfo bajo bandera amarilla después de que su compañero de equipo Spencer Pigot chocó a cinco vueltas del final de la competencia, realizada sin gente en las tribunas por primera vez en 104 ediciones debido a la pandemia del coronavirus.
Pigot requirió atención médica en la pista, la escena del accidente fue un enorme campo de escombros y el tiempo de limpieza habría sido muy prolongado. También restaban sólo cuatro vueltas, tiempo insuficiente para un reinicio adecuado.
AP