Víctor Clark expone que el sistema hídrico en Falcón está crítico

En su primera edición del programa digital «A La Hora Que Sea» el gobernador del estado Falcón reveló la condición actual del sistema hídrico regional. Según el mandatario, los 8 embalses del estado que se alimentan de las lluvias y los ríos poseen hoy día una realidad que compromete la capacidad hídrica y la demanda diaria.

En el caso del embalse Barrancas que cubre la demanda de las poblaciones de Coro, Cumarebo, Tocópero, La Vela y Paraguaná está en una capacidad crítica. Detalló el gobernador, que según estudios nacionales del comportamiento hídrico cada uno de los embalses está entre el 15 y 20% de su capacidad para los próximos meses y años.

El mandatario argumentó que si el plan es que cada gota cuenta también es necesario analizar que cada gota cuesta, pues llevar el agua a cada comunidad tiene un costo operativo para la hidrológica que determina el pago justo del servicio.

Asimismo, en el segmento de entrevistas de este programa el jefe de estado regional conversó con el vicerector académico de la UNEFM, Miguel Perozo, quien dio los basamentos científicos y de rigor que sustentan los elementos del sistema. Desde el punto de vista climático Falcón es uno de los estados más secos del país, lo que directamente nos asocia a la carestía de agua.

Aseguró Perozo que «Lo que pasa en el embalse Barranca que se secó hace más de 5 años, es producto de la sobreexplotación y una sequía operacional».

Cuando llega Víctor Clark a la gobernación de Falcón ya había una «Sequía Operacional» producto de fallas en el modelo de gestión que incidió en los niveles de los embalses.

«Cuando hablo de sequía operacional me refiero a una eficiencia del 20 o 25 % y una ineficiencia de 70% y 80% con pérdidas de volúmenes altísima»

El profesor Miguel Perozo detalló que hace más de 3 años se realizó un diagnóstico donde se determinó que un 56% de los recursos deben ir dirigidos al Sistemas de Adicción, 30% a plantas potabilizadoras y 10% a estaciones de bombeo.

«Se hace un esfuerzo en potabilizar el agua pero que se pierde en las fugas producto de un sistema que tiene más de 40 años sin mantenimiento y por tomas clandestinas», finalizó.

Nota de prensa