El lunes 7 de septiembre un paciente con una herida en la pierna, que ameritaba sutura y una cura, fue trasladado en burro hasta la emergencia del ambulatorio rural de Manzanita, un pueblo con 9.300 habitantes de la parroquia Buria en el municipio Simón Planas, estado Lara.
Los familiares del paciente debieron subirlo a un burro por no conseguir un carro con gasolina para llevarlo al ambulatorio desde el sector Barrio Negro que se encuentra a 10 kilómetros de distancia de Manzanita. La parroquia que está conformada por 38 caseríos no cuenta con ambulancia, señalaron dos habitantes del pueblo consultados por El Pitazo.
“En estos días también llegó una muchacha a ese ambulatorio con apendicitis, tuvo que salir caminando hasta la carretera y pedir cola hasta Yaritagua para que la atendieran. En el ambulatorio de Manzanita no hay ambulancia ni vehículo, no hay dotación de insumos médicos y tienen que reciclar insumos como los macrogoteros”, declaró Ericka Camacho, dirigente del partido Acción Democrática en el municipio Simón Planas.
Asimismo, indicó que la última dotación de equipos de bioseguridad para el personal del centro de salud fue realizada por la Fundación Barquisimeto Actívate. “El ambulatorio de Manzanita no recibe atención por parte de los organismos competentes”, agregó.
Sin gasolina
La escasez de gasolina que se acentuó en Lara en agosto, paralizó las pocas unidades de transporte disponibles en la parroquia Buria.
Escenas como la del paciente sobre un burro entrando al ambulatorio ya se hacen frecuentes en la localidad, sostuvo Camacho.
“No hay transporte ni gasolina y la gente está imposibilitada para moverse. Los habitantes subsisten con la venta de carne que están sacando en motos, bicicleta o sobre animales a las bodegas. En Buria desde hace cinco meses no tienen gas, tampoco tienen agua y desde hace tres meses no les distribuyen cajas del Clap”, dijo Camacho.
El Pitazo