Este martes 29 de septiembre se conoció que nueve ballenas varadas murieron en una playa de la costa norte de España, si bien las autoridades locales y los residentes se las arreglaron para ayudar a otras ballenas a volver al mar.
Los calderones, también denominados ballenas piloto, fueron vistas el lunes en la playa de Morís, en la localidad asturiana de Carreño. Funcionarios y voluntarios trabajaron durante la noche para ayudarlas, dijo el Gobierno de Asturias.
El dispositivo logró “que algunos calderones sobrevivieran y regresaran mar adentro, aunque aún permanecen cerca de la costa”, según señaló el Gobierno local, que agregó que los esfuerzos se concentraban ahora en que estos seis cetáceos no regresaran a la costa.
Los cuerpos de las nueve ballenas muertas serán sometidos a una autopsia en la cercana ciudad de Gijón.
Reuters