Una mujer de nacionalidad venezolana, quien usaba a sus hijos para pornografía y los sometía a torturas, fue capturada en Medellín, Colombia.
Según las autoridades, vendía por redes sociales pornografía infantil, utilizando como modelos a otros menores y a sus propios hijos, de 4, 8 y 13 años de edad, sometiéndolos a torturas y a todo tipo de vejámenes.
La captura de Moraima Escarlet Vásquez se dio luego de que en Estados Unidos a un ciudadano le fuera encontrado material pornográfico, el cual, según lograron establecer las autoridades de ese país, era enviado por una mujer venezolana radicada en la ciudad de Medellín.
Adicionalmente, también grababa videos, torturando animales, por pedido de algunos de sus clientes.
Vásquez fue capturada en el barrio Belén Rincón de la capital de Antioquia, donde se hizo efectiva la circular roja y se le notificó su solicitud de extradición por el Tribunal del Distrito Vermont de Estados Unidos.
La señalan de los delitos de: conspiración para secuestrar y asesinar a una persona en un país extranjero; conspiración para producir pornografía infantil; producción e intento de producción de pornografía infantil; recepción e intento de recepción de pornografía infantil.
Los menores de edad quedaron a disposición de la autoridad judicial para el restablecimiento de derechos.
La Nación