Venezuela se volvió global cuando el derroche petrolero por sus elevados precios, corrompió a gobiernos, líderes y sistemas ideológicos negativos en cuanto ofrenda y garantía de libertad para los ciudadanos. Se repartió el botín del Socialismo del s. XXI sin imaginarse que aquello que se iniciaba se convertiría, en lo que ha fundamentado evidenciar las perversas derivaciones de lo que se hizo, para mantener el poder.
Aquella efímera y despilfarrada riqueza ideologizada, no excluyó graves violaciones a los Derechos Humanos, una de las peores manchas de nuestra historia republicana. Ahora, cuando la tecnología consume parte importante de nuestro ser pensante y racional y cuando es capaz de derribar mecanismos atroces y evidenciarlos con suma facilidad, no se tomò en cuenta de lo significativo de violar estos derechos naturales, con los cuales nacemos y morimos.
Todos los participantes del festín inicial de la globalizada Venezuela, dividieron el pastel en pedazos con nombres diferentes y, dieron origen a caras falsas como; corporaciones, acuerdos, convenios, cartas de intención y cuanto documento pudiera justificar aquella avalancha de recursos petroleros devorados con rapidez, por instancias que cuales aves de rapiña merodearon el pastel, inmenso por fuera y vacío por dentro, en cuanto reivindicaciones para quienes eran los destinatarios de la coyuntura petrolera, el pueblo venezolano.
El país se empobreció irremediablemente. Lejos de los aprovechadores, no faltaron figuras como el famélico Pablo Iglesias, hoy en sendo cargo en el gobierno español, Ernesto Samper, expresidente colombiano y menos, la guerrilla de distintas dimensiones, también neogranadinas.
PDVSA, una de las más grandes y modernas del mundo en materia petrolera, fue la primera presa digerida. De sus arcas, salieron los recursos para alimentar a numerosas individualidades cuyos enriquecimientos fueron inversiones trastocadas en desinversiones y corrupción.
Demandas internacionales, por incumplimiento de pagos y un colapso total marca a la empresa petrolera, incapaz hoy de producir gasolina ni siquiera para el mercado nacional. La misma situacion, tocó a las empresas del estado cerradas y abandonadas en aquel emporio del estado Bolívar.
Desde el estado Bolìvar, se aseguró el oro como fuente sustitutiva de ingresos, pero,las condiciones deplorables se reducen a mafias, que extraen el mineral, como terribles depredadores del medio ambiente. Saqueos inexplicables e irreverentes hablan de la presencia de grupos guerrilleros, dueños en parte de las minas en producción .A ellos, se unen otras organizaciones con desproporcionadas conductas para el enriquecimiento vil.
Venezuela, agotada en su capacidad productiva y condiciones políticas ha tocado fondo cuando se refieren Derechos Humanos. Desde el año 2014 comenzó la honda preocupación y dio vuelta al mundo, de forma diferente aquella avalancha de recursos petroleros, con tanto picotear de rapiña. Fue un fardo pesado este episodio violatorio de principios elementales del ser humano. Venezuela, demandó solidaridad global para llamar la atención. Logró activar mecanismos a través de instancias distintas para denunciar las irregularidades humanas, sociales, políticas y culturales.
Desde la ONU el anterior Comisionado de los Derechos Humanos, Zaid Ra `ad Hussein había rendido un Informe sobre la situaciòn.Su vacante por el término de su gestión, puso en manos de su sucesora, Michelle Bachelet, uno más contundente dado a conocer el pasado año.
Justamente esta semana, conocida la publicación de la Comisión Independiente Internacional, que responsabiliza a funcionarios de manera directa, sentencia Bachelet como elemento agravante, que desde junio a la fecha, se han producido 700 muertes y desde enero 2000 fallecidos.
Este Informe de la Comisión Internacional Independiente, ha desencadenado reacciones de gobiernos y líderes. El gobierno tocó piso al derrumbarse estrepitosamente y sin alianzas ante el mundo un poco sorprendido, porque todavía quedaban acomodos con personajes más que con gobiernos.
En cuanto a países, solo la sempiterna Cuba, aliada desalmada, tímidamente, dijo su representante, en el evento de la Asamblea de la ONU que no había suficientes pruebas comprobatorias de las acusaciones. Discurso rayado por vaga repetición. Sin consecuencias.
En la ONU, donde se generó el Informe, difundido el pasado 16 esta y en el marco de la Asamblea General, los representantes de los países miembros, demandaron contundencia sobre la urgencia de responder a tan terrible situación que ahora encara la solidaridad global.
Los venezolanos, brindaron informaciones a la Comisión Internacional Independiente, cuya documentación recoge testimonios de más de 300 casos contenidos en 4000 páginas. Esa Comisión no se le permitió la entrada al país y las informaciones se dieron fuera de nuestra frontera. Recordemos la tecnología que marca las nuevas técnicas de Información y Comunicación.
Venezuela, debe servir de ejemplo y su modelo debe desterrar toda posibilidad de asentarse en otros rincones donde prevalece la anarquía por la falta del estado de derecho y la desventura por la injusticia, camino seguro de la paz y redención.
Es necesario señalar que salvo, algunos políticos de oposición, el éxito anotado, responde a las organizaciones que durante años han empeñado sus mejores esfuerzos por llamar la atención sobre la situaciòn.Una buena entre tantas otras; el Foro Penal.
Eneida Valerio Rodríguez / @eneidavalerio