Durante las recientes conversaciones con la parte rusa, Estados Unidos confirmó su intención de desplegar misiles estadounidenses en la región de Asia-Pacífico, según lo afirmó este sábado el embajador ruso en Washington, Anatoli Antónov.
«El alcance de estos misiles llega a la Federación de Rusia y afecta a objetivos estratégicos de disuasión nuclear», enfatizó el diplomático ruso, en declaraciones al programa ‘Gran Juego’ de la cadena rusa Pervy Kanal.
Este viernes, la Casa Blanca manifestó su rechazo a la propuesta del presidente de Rusia, Vladímir Putin, de extender sin condiciones y por un año al menos el Tratado de Reducción de Armas Estratégicas ruso-estadounidense, más conocido como START III, que expira en febrero de 2021. Según estima Antónov, la Administración Trump tomó esta decisión sin someter la propuesta rusa a «ningún análisis serio».
«Ayer, en el espacio informativo de EE.UU. hubo dos ‘bombas’. La primera fue cuando el mundo escuchó que Vladímir Putin estaba dando un paso más hacia los estadounidenses, tratando de salvar el control de armas. Y la segunda, cuando los estadounidenses, definitivamente sin ningún análisis serio, simplemente rechazaron la propuesta», declaró el jefe de la misión diplomática rusa.
Sin consenso
La parte rusa considera que prorrogar el Tratado por un año y sin condiciones permitiría llevar a cabo «negociaciones significativas sobre todos los parámetros». Por su parte, el asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Robert O’Brien, comunicó que la propuesta de Putin de extender el acuerdo sin «congelar» las ojivas nucleares era «un mal comienzo».
El pasado mes de mayo, EE.UU. declaró que quiere incluir más armas rusas en el Tratado START III, al tiempo que sugirió que China debería ser incluida en los términos de prorrogación del acuerdo. Moscú, a su vez, calificó las condiciones de Washington de «inaceptables» y declaró que no puede continuar las negociaciones «en términos de ultimátum».
Según Antónov, EE.UU. está tratando de distorsionar deliberadamente las razones por las que el Kremlin no acepta las propuestas de la Administración Trump. «Es triste que Estados Unidos esté tratando de poner todo patas arriba, tratando de mostrar todo como si Rusia quisiera destruirlo todo», expresó el embajador.
El Tratado de Reducción de Armas Estratégicas (START III), el único tratado vigente de reducción de armas entre Rusia y Estados Unidos, expira en febrero de 2021. El pacto se firmó en 2010 y contempla el monitoreo mutuo de los arsenales nucleares por parte de Washington y Moscú.
RT Actualidad