Juventus y Barcelona, dos de los grandes equipos europeos, se citan este miércoles en Turín en un partido muy esperado por un enfrentamiento que finalmente no sucederá, después de que Cristiano Ronaldo diera positivo por coronavirus y un nuevo test confirmara que aun sigue teniéndolo.
La primera acción de peligro se dio con un remate de Miralem Pjanic de media distancia, que Wojciech Szczesny rechazó hacia un costado. El rebote no lo pudieron rechazar la defensa italiana y Antoine Griezmann hizo temblar el palo con un potente zurdazo.
Pese a esa acción, el juego se alejó de los arcos debido a la presión alta del local que no le permitía al cuadro español conducido por Ronald Koeman salir con comodidad. Sin embargo, los azulgranas vestidos de ros sorprendieron sin la posición de un centrodelantero fijo y con la movilidad de Messi, Pedri y Griezmann, complicaron por momentos a los zagueros de la Juve.
El 1 a 0 llegó a los 14 minutos cuando el Barcelona distrajo a sus rivales con un toqueteo por izquierda que Messi rompió con un cambio de frente perfecto para Osumane Dembélé. El francés encaró por derecha, amagó a escapar para la zurda y luego se acomodó para su pierna menos hábil para desenfundar un remate de media distancia que, gracias a un desvío en una de sus marcas, se coló por arriba del arquero en el segundo palo.
El conjunto culé contó con varias opciones para ampliar el marcador, Messi tuvo un mano a mano, tras un taco de Griezmann, pero definió mordido y su disparo se fue ancho. El ex Atlético de Madrid también tuvo la suya dentro del área tras una buena combinación entre el argentino y Dembélé, pero Szczesny le ahogó el grito. Sin embargo, el primer tiempo finalizó solamente 1 a 0.
En el entretiempo Ronald Koeman mandó a la cancha a Sergio Busquets en lugar de Ronald Araujo, quien sufrió molestias en el muslo derecho. Frankie De Jong pasó a jugar de central.
Pese a esa modificación, la Juventus no aprovechó la inexperiencia del holandés en esa posición y el conjunto visitante creció en juego y acorraló al cuadro local. Pjanic, Pedri y Messi tomaron los hilos del ataque y encabezaron varios ataques peligrosos que por falta de precisión no terminaron en gol.
El equipo de Andrea Pirlo pudo haber igualado el marcador cuando Morata definió en el área y le acertó al arco, pero el VAR detectó un fuera de juego milimétrico del español, que en el primer tiempo ya había sufrido dos offside que también terminaban en gol.
Algunos de los jugadores del Barcelona parecen atravesar un karma con el gol y eso quedo claro a los 74 minutos cuando Messi dejó cara a cara a Griezmann con el arquero, pero el francés volvió a fallar de zurda al rematar ancho.
A falta de cinco minutos, la Juventus se quedó con 10 por la expulsión de Demiral, quien había sido amonestado tras una dura falta contra Messi y vio la segunda amarilla tras llevarse por delante a Pjanic en su intento por alcanzar el balón.
Sobre el final, llegó el 2 a 0 cuando Danilo se llevó puesto a Ansu Fati dentro del área y provocó un penal infantil que le dio a Messi la oportunidad de marcar su tanto. El argentino, desde los 12 pasos, no falló y sentenció el resultado.
El Barcelona, que debutó en la competición con un 5-1 ante el Ferencvaros húngaro, llega al duelo en medio de un escándalo institucional que derivó en la renuncia de su presidente Josep Maria Bartomeu, junto a su directiva.
En cuanto a lo futbolístico, arrastra muchas dudas en el campeonato local, donde lleva tres partidos sin ganar, un empate ante el Sevilla y dos derrotas (Getafe y Real Madrid). Frente a los merengues, el equipo tuvo momentos de buen fútbol, pero todo se vino abajo por un penal que ejecutó Sergio Ramos cuando estaban 1-1.
Para el partido en Turín, Koeman forma un eje defensivo inédito, debido a la baja por sanción de Gerard Piqué, uno de los jugadores indiscutibles en el once titular. Su puesto es ocupado por el uruguayo Ronald Araújo. El joven central de Rivera (1999) tendrá una de las grandes oportunidades para reivindicarse y en una de las plazas más importantes de la Europa futbolística.
En la parte delantera, Pedri mantiene la titularidad, ahora que Philippe Coutinho está lesionado, y vuelve Antoine Griezmann como centrodelantero, pese a las quejas del jugador sobre esta posición. En la banda derecha está Ousmane Dembélé
El técnico Andrea Pirlo, en tanto, debió gestionar una delicada situación defensiva, pues tiene las bajas del holandés Matthijs De Ligtl, el brasileño Álex Sandro y Giorgio Chiellini, todos lesionados.
En el centro del campo regresa el uruguayo Rodrigo Bentancur, quien descansó ante el Verona, junto al francés Adrien Rabiot, con Federico Chiesa y el sueco Dejan Kulusevski que se juegan dos plazas por las bandas. El español Álvaro Morata, que ya marcó tres goles en esta campaña, será el centrodelantero que se ubicará por delante del argentino Paulo Dybala.
Agencias