A menos de dos meses de cumplirse un año de la intervención de la Curva de Molina, la Alcaldía Bolivariana de Maracaibo, con apoyo del Concejo Municipal, arrancó la segunda etapa del megaproyecto de transformación de esos espacios, con una asamblea de comerciantes ubicados en el mercado temporal, para escuchar los planteamientos de los plataneros, fruteros, verdureros y pescadores de la zona.
En los espacios del De Candido de la Curva de Molina, el alcalde bolivariano de Maracaibo, Willy Casanova, junto a la presidenta del Concejo Municipal, Jessy Gascon, señaló que la trasformación de la Curva de Molina implica un proyecto personal, porque la recorrió desde su época estudiantil y para él representa la historia de su vida “Creo que es de las cosas más importantes que he hecho en mi carrera política”, confesó el alcalde, quien recalcó la necesidad de extremar medidas para mantener el orden porque “no nos podemos permitir replicar lo viejo”, dijo, “nos merecemos una mejor calidad de vida y espacios dignos y bonitos”.
Seis meses de exoneración
Debido a las dificultades acarreadas por la pandemia, Casanova autorizó darles a los nuevos comerciantes formalizados seis meses de exoneración en el pago de los impuestos, con el compromiso de ponerse al día en futuro. Igualmente resaltó la importancia del pago de tributos, como un aporte para que la ciudad continúe creciendo, y además se comprometió a estimular el regreso de la actividad comercial en horario de tarde-noche.
La voz del comerciante
Voceros como Servando Soto, vendedor de frutas y verduras, y Guillermo Beltrán, platanero, mencionaron la necesidad de espacios de dimensiones suficientes para que los clientes puedan seleccionar y comprar cómodamente sus productos, así como zonas de descarga y estacionamiento.
Karen Arévalo expresó su premura por la apertura de los próximos mercados, indicando que las bajas ganancias de muchos comerciantes, a raíz de la pandemia, se han convertido en deudas y el consecuente abandono de los espacios.
Por su parte, Meiro García puso sobre la mesa la situación de muchos comerciantes que no confiaron en el proceso anteriormente, “pensaron que el gobierno venía a tumbar la Curva e irse”, refirió.
Otros, como Yaneli Amaya, Jenifer Fuenmayor y Ángel Días clamaron por oportunidades para los nuevos emprendedores, quienes vienen de sus hogares empujados por la necesidad y desean ser partícipes de la transformación económica de la Curva de Molina.
En respuesta, el alcalde Casanova acordó organizar horas para carga y descarga y convocó futuras reuniones para evaluar las posibilidades de entregar el próximo mercado municipal antes de lo previsto y replantear las dimensiones de algunos puestos comerciales.
Nota de Prensa / Alcaldía de Maracaibo